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Alemania, el único elemento positivo en el PMI compuesto de Markit en la zona euro

Redacción - Viernes, 23 de Octubre

PMI compuesto de Markit en la zona euro octubre 49,4 vs 49,3 esperado. La actividad comercial volvió a caer en territorio de declive en la región en su conjunto en octubre, puesto que un crecimiento cada vez más rápido de la producción manufacturera fue contrarrestado por un deterioro progresivo de la actividad del sector servicios debido a la creciente preocupación por la COVID-19.

Alemania fue el único elemento positivo, mientras que Francia y el resto de la región en su conjunto cayeron aún más en territorio de declive. La tasa de pérdida de empleo se atenuó, pero los indicadores a futuro se deterioraron: los niveles de nuevos pedidos recibidos mostraron un renovado declive y el optimismo empresarial para los próximos doce meses decayó hasta su mínima desde mayo pasado. Mientras tanto, las presiones deflacionistas se han atenuado, puesto que los costes aumentaron a un ritmo más acelerado.

El Flash del Índice PMI® Compuesto de la Actividad Total de la Zona Euro de IHS Markit cayó por tercer mes consecutivo en octubre, descendiendo desde 50.4 registrado en septiembre hasta 49.4 en octubre, indicando la primera contracción de la actividad del sector privado desde junio. Aunque el índice permanece muy por encima de las mínimas sin precedentes observadas durante lo peor de la pandemia en el segundo trimestre, el renovado declive plantea la posibilidad de que la economía de la región podría volver a contraerse en el cuarto trimestre.

El estudio también reveló tendencias cada vez más divergentes entre los sectores. El crecimiento de la producción manufacturera se aceleró hasta su máxima desde febrero de 2018, respaldado por un aumento del volumen de nuevos pedidos recibidos al ritmo más rápido desde enero de 2018. Por el contrario, la actividad del sector servicios decreció por segundo mes consecutivo, deteriorándose al ritmo más intenso desde mayo pasado. Si se excluye el periodo comprendido entre marzo y mayo en lo peor de los confinamientos por la COVID-19, la última caída de la actividad del sector servicios fue la mayor de los últimos ocho años. Los volúmenes de nuevos pedidos recibidos en el sector servicios también cayeron a un ritmo más intenso.

También se revelaron tendencias divergentes entre los diferentes países.

Alemania siguió indicando un crecimiento firme, y el Flash del Índice Compuesto apenas descendió de 54.7 a 54.5, registrando el cuarto mes consecutivo de sólida expansión. Aunque la producción manufacturera aumentó a un ritmo solo superado en dos ocasiones en la historia de la encuesta, desde 1996, la actividad del sector servicios se redujo por primera vez desde junio pasado.

Mientras tanto, en Francia se observó un deterioro de la actividad total por segundo mes consecutivo. El Flash del Índice PMI Compuesto cayó de 48.5 a 47.3, señalando un mayor ritmo de contracción. Este segundo mes de contracción se vio acompañado de un debilitamiento del ritmo de crecimiento de la producción manufacturera.

En el resto de la región, la actividad total decayó por tercer mes consecutivo, y el ritmo de declive fue el más acelerado desde principios de 2013 (si no se considera el punto álgido de la pandemia). Una sólida expansión en la producción manufacturera fue más que contrarrestada por un mayor ritmo de contracción de la actividad del sector servicios.

Por otra parte, se produjeron recortes de empleo en toda la zona euro en su conjunto por octavo mes consecutivo, aunque el ritmo de pérdida de empleo se siguió moderando frente a la máxima récord de abril hasta registrar su mínima desde que comenzaron a reducirse las plantillas en marzo pasado. De todos modos, el ritmo de recorte de empleo se mantuvo más alto que en cualquier otro momento desde junio de 2013 antes de la pandemia.

Se observaron pérdidas de empleo tanto en el sector manufacturero como en el sector servicios, pero el sector industrial indicó el mayor ritmo de declive. Se observaron reducciones de empleo en Alemania, Francia y el resto de la región pero Alemania reveló signos alentadores de que su mercado laboral se acerca a la estabilización.

La persistente necesidad de recortar las plantillas en parte se debió a que las empresas registraron un exceso de capacidad, tal y como lo indica una nueva reducción de los pedidos pendientes de realización. El declive de los pedidos por realizar se limitó al sector servicios, mientras que el sector manufacturero indicó el mayor incremento desde febrero de 2018 (a su vez, encabezado por Alemania), destacando unas tendencias cada vez más divergentes entre los sectores.

Por lo que respecta a los indicadores a futuro, las presiones inflacionistas se moderaron en octubre. Los precios medios cobrados por los productos y servicios disminuyeron por octavo mes consecutivo, pero el ritmo de declive se atenuó hasta su mínima registrada en este periodo. Los precios medios de venta del sector manufacturero aumentaron, subiendo por primera vez desde junio de 2019, aunque las tarifas del sector servicios siguieron en descenso. Alemania registró la mayor subida de las presiones de los precios, y sus precios medios cobrados aumentaron por primera vez desde febrero pasado.

El mayor aumento de los costes de los insumos desde febrero pasado puso en evidencia indicios de desarrollo de presiones de los precios subyacentes. Se han registrado aumentos tanto en el sector manufacturero como en el sector servicios.

Por lo que respecta a las perspectivas a futuro, las expectativas de actividad para los próximos doce meses se han desplomado hasta su mínima desde mayo pasado, deteriorándose tanto en el sector manufacturero como en el sector servicios, y en este último se observó una caída particularmente abrupta del sentimiento. El optimismo también fue especialmente débil en Francia.




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