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Europa es la nueva China y eso tendrá importantes consecuencias en los mercados

Carlos Montero - Miercoles, 08 de Octubre

El exceso de ahorro europeo y la falta de oportunidades domésticas de inversión podrían mantener a raya los costos de endeudamiento de Estados Unidos e impulsar los mercados mundiales en los próximos años. Por lo menos así lo creen los analistas de Deutsche Bank. Los inversores y los estrategas han sacado a relucir una serie de términos en los últimos años en un intento de describir el mundo tras la crisis financiera.

Así, tenemos la tesis del "estancamiento secular", que mantiene que los mercados se verán dirigidos por una tendencia de crecimiento débil y unas tasas de interés persistentemente bajas.

Por otro lado, tenemos la tesis de la "normalización", que argumenta a favor de una reanudación del crecimiento que provocará un ascenso en los tipos y un marco de política monetaria más normal, liderada por los EE.UU.

Ningún escenario está completo, dice el informe de Deutsche Bank que recoge MarketWatch. Esto es porque los dos escenarios ignoran los desequilibrios globales entre las economías deudoras y las ahorradoras, que sigue siendo la característica más importante del sistema financiero mundial.

En cambio, es el enorme exceso de ahorro de Europa - que Deutsche Bank llama "euroglut" - lo que impulsará las tendencias globales en el futuro previsible. Mientras el "euroglut" parece similar al "estancamiento secular", las conclusiones en los precios de los activos son muy diferentes y mucho más poderosas.


Entonces, ¿qué es el "euroglut"?

En pocas palabras, Deutsche Bank lo describe como la falta de demanda interna europea provocada por la crisis de la eurozona. La evidencia más clara del fenómeno es la combinación de altas tasas de desempleo de la zona euro junto con un récord del superávit en cuenta corriente. Ambas reflejan el mismo problema: demasiado ahorro en relación con las oportunidades de inversión.

Pero lo que realmente lo hace especial es su tamaño:

Con alrededor de 400 mil millones de dólares cada año, el superávit por cuenta corriente de Europa es más grande que el de China en la década de 2000. Si se mantienen, sería el mayor superávit jamás generado en la historia de los mercados financieros globales. Esto es importante.

En otras palabras, "Europa es la nueva China, y gracias a un gran demanda de activos en el extranjero, desempeñará un papel dominante en la conducción de las tendencias mundiales de precios de los activos por el resto de esta década", dice Deutsche Bank.


¿Qué significa esto?

Por un lado, implica que la caída en el valor del euro no ayudará mucho a la economía de la región. ¿Necesita el euro incluso un mayor superávit comercial?" se burla el estratega de Deutsche Bank George Saravelos. Los problemas de Europa se centran en la debilidad de la demanda doméstica, dice.

A nivel mundial, los europeos - entre los grandes ahorradores del mundo - impulsarán las tendencias del flujo de capital para el resto de la década, haciendo que Europa sea el mayor exportador de capital en el siglo XXI. Deutsche Bank cree que el Banco Central Europeo emprenderá una ronda agresiva de compra de activos, que provocará una caída de los rendimientos reales y creará una "escasez de activos" domésticos.

Eso provocará que los inversores europeos vayan al extranjero en la búsqueda de rendimiento.


¿Cómo reaccionarían los mercados?

1) Las salidas provocarán que el euro caiga cada vez más, perdiendo finalmente la paridad con el dólar. Deutsche Bank pronostica que el euro vaya a 95 centavos de dólar a finales de 2017.

2) Las curvas de rendimiento estarán muy planas, siendo el "beneficiario principal" de la demanda europea la renta fija de Estados Unidos. De hecho, si hay suficiente demanda para los instrumentos de largo plazo, el rendimiento de los bonos EEUU a 10 años podría cotizar por debajo de los Fed funds terminales, un fenómeno que se produjo en la década de 2000 en medio del llamado enigma de los bonos.

3) A la larga, esto también debería ser una buena noticia para los mercados emergentes, ya que los flujos harán que la demanda marginal de activos de mercados emergentes suba en vez de bajar.

 

Fuentes: Deutsche Bank - MarketWatch




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