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Grecia, de nuevo

Santiago Niño Becerra - Martes, 04 de Abril

Las cosas, si se quiere que sirvan para lo que se busca, hay que hacerlas cuando hay que hacerlas, es decir, cuando toca. Si Grecia antes del primer rescate hubiese suspendido pagos no estaría como ahora está ni como va a estar porque hubiera cogido a todo el mundo con el paso cambiado y en la negociación posterior hubiese llegado a acuerdos que ahora son impensables porque son imposibles.

Grecia lleva tiempo caminando hacia el desguace total y hacia la emigración masiva, de hecho ya hay diversos activos de su economía que están, de facto, en manos de sus acreedores, como sus principales aeropuertos, y varios cientos de miles de sus jóvenes han huido, que no emigrado, sin visos de poder regresar jamás.

Grecia fue animada al endeudamiento sin tino y ahora aquellos que le prestaron sin medida han venido a repartirse lo que hay; casi parece un plan, ¿verdad?. No es nuevo: ya ha pasado en el pasado. No es nuevo y viene a confirmar la regla de oro de la economía: las deudas, alguien, de alguna manera, en algún momento, las acaba pagando.

Y si en su momento Grecia no hizo lo que debió hacer sería porque no debía, ¿no creen?.

http://internacional.elpais.com/internacional/2017/02/20/actualidad/1487599511_464011.html

http://internacional.elpais.com/internacional/2017/02/10/actualidad/1486725150_239589.html

@sninobecerra

Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.




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