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grecia: moralejas tras el último acto

Santiago Niño Becerra - Viernes, 17 de Julio

No, no es un error: la inicial en minúsculas. El Estado del Egeo ya es un país con minúsculas: el Miércoles se completó el cambio con la aceptación de lo que se votó en el Parlamento. Ahora ya todo va a ser un seguir porque todo está ya delineado. Claro, claro, el país puede no conseguir los dineros que necesita porque la recaudación fiscal no alcance lo programado, pero eso, en todo caso, sucederá mañana.

Ahora ese Estado del Egeo pasará a las páginas interiores de los periódicos y a los minutos centrales de los telenoticias: ya ha dejado de representar un potencial problema, por lo que ya ha dejado de ser noticia: de estar de moda. Las miserias que sucedan a partir de ahora en su interior serán temas ‘de consumo interno’ y, en todo caso, motivo de un documental dentro de un año.

De lo que ha sucedido en grecia pueden extraerse, pienso, una serie de moralejas:

1 – Normalmente, lo que empieza mal acaba mal. grecia fue metida con calzador en el euro, y cuando se han acabado las razones que justificaron aquella introducción, grecia sigue pero convertida en un país de tercera.

2 – Visto en perspectiva y viendo como ha acabado la película, pienso que para ella hubiese sido mejor no haber rentrado. Cierto: no hubiese ido ‘lo bien que fue’, pero ahora, pienso, no estaría lo mal que está y que va a seguir estando durante décadas.

3 – En las democracias las ciudadanías votan, pero el resultado de lo que voten puede que ni sea tenido en cuenta, ni sirva para nada, ni comprometa a nadie en nada. Cuando lo-que-hay-que-hacer no coincide con lo que dice el pueblo, se pasa de lo que el pueblo dice, así, sin más, porque el pueblo no vota cada día y Los Mercados sí.

4 – Los políticos, aunque sean los representantes de una ciudadanía que esa ciudadanía ha elegido libremente, e independientemente de su color, cada vez tienen un menor peso porque existen razones, motivos, que van mucho más allá de sus programas, de su ámbito de referencia, y de sus realidades cotidianas. Si mucho antes de esta crisis el Presidente Jacques Chirac dijo aquello de que el problema de los programas con que los partidos concurrían a las elecciones estaba en quienes se los creían, calculen ahora que el mundo es postglobal, se halla hiperrelacionado y las fronteras ya sólo cuentan en los mapas. Los políticos –los de todos los países– hablan a nivel local cuando lo que sobrevuela sus países –todos los países– son temas de influencia planetaria.

5 – Como ya hemos comentado, en esta crisis se están ensayando cosas, y, en cada caso, el tubo de ensayo es un país. Pienso que lo que se ha ensayado en grecia es la implementación de una serie de medidas de modo que el grupo salga beneficiado por encima de los individuos porque el grupo ha de primar sobre los individuos. Para Los Mercados, para las finanzas de Europa, para el conjunto Europa, grecia es una anécdota, y la miseria y las carencias de su población una nota a pie de página.

6 – Información, la justa. Recordemos que los prolegómenos de esta crisis fueron financieros y su manifestación bancaria. En el momento en que se halla el Sistema Capitalista los elementos nodulares del mismo son los bancos, luego el objetivo primero y último, el único, era salvar a los bancos porque, por definición, un banco no puede quebrar; en 1873, incluso en 1929, si, hoy un banco sistémico no podía quebrar, y todo, absolutamente todo se dirigió a ese objetivo. Pero eso no se explicó así porque las ciudadanías no lo hubieran ‘entendido’, por lo que volvemos al punto 4 convenientemente aderezado de ‘brotes verdes’, ‘luces al final del túnel’, ‘destellos’ y ‘raíces vigorosas’, pero al final las ciudadanías están para lo que han de estar: para hacer lo que les digan quienes saben lo que es conveniente hacer.

7 – Los Estados cada vez tienen un menor peso y juegan un menor papel. La deuda total del planeta asciende a 200 B$ y es impagable: im-pa-ga-ble; da igual que se diga lo contrario y poco importa en el idioma en que se diga. Esa deuda se halla repartida entre individuos, familias, compañías, bancos, municipios, Estados y servidores de todo el planeta, pero va más allá de los individuos, de las familias, de las compañías, de los bancos, de los municipios y de los Estados que la deben (de los servidores no porque ellos están en todas partes y a la vez). En vez de deuda piensen en otras cosas: operaciones comerciales, publicidad o mera información. En ese contexto, ¿qué importancia tiene un Estado minúsculo, pobre, y marginal?

En ese escenario, ¿qué papel representa grecia?.

@sninobecerra

Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.




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