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Rebajas

Santiago Niño Becerra - Martes, 24 de Julio La Comisión Europea quiere implantar rebajas.

Tras haber forzado una reducción de tarifas para las comunicaciones de voz cuando las que la/el que la realiza se halla en otro paíт­s distinto del suyo, ahora quiere forzar una rebaja en el precio de los mensajes de texto -SMS- en los que se den las mismas circunstancias; y, también, para las tarifas que las compañíт­as de telefoníт­a móvil aplican a la conexión a Inet efectuada a través de celular, que es como llaman al móvil en Latinoamérica. Veamos el tema porque la cosa va mucho más allá de lo aparente.

La Comisión Europea, en base a aquella cosa de la que ya nadie se acuerda y que se denominó Agenda de Lisboa, sigue queriendo que las europeas y los europeos nos introduzcamos masivamente en esa otra cosa difusa y virtual que se ha dado en llamar “Sociedad de la Información”, y para ello ha llegado a la conclusión de que las tarifas de móvil deben ser mucho más reducidas. Vale.

Pero, por otro lado, la UE es un ente en el que el sistema económico vigente es el Capitalismo, con rostro europeo, síт­, pero Capitalismo al fin y al cabo, por lo que las regulaciones deben ser las míт­nimas. (Recuerden lo que dijo hace escasíт­simos díт­as el nuevo presidente de la CEOE, el Sr. Gerardo Díт­az Ferrán, “La mejor empresa pública es la que no existe”, frase en mi opinión totalmente desafortunada ya que recuerda a aquella otra: “La mejor políт­tica industrial es la que no existe”, pronunciada ésta por alguien que, cuando la dijo, era ministro).

Bien, en lo que estábamos. Debido a que estamos en un sistema de libre empresa, las compañíт­as de telefoníт­a móvil han puesto, por segunda vez, el grito en el cielo: ¿por qué, en base a qué, han dicho, alguien externo a nosotras se mete en nuestras políт­ticas de precios?. En honor a la verdad, y aunque el que esto escribe va a beneficiarse de todas las rebajas tarifarias a las que la Comisión fuerce a las compañíт­as, he de manifestar que no estoy de acuerdo con esta regulación.

“O semos o no semos”, que decíт­a aquél. O se es capitalista con todo lo que ello comporta o se decide serlo en según qué casos y se deja muy claro en que casos no se va ser; es decir, se define muy claramente los casos en los que, por utilidad pública, por interés general, por necesidades estratégicas, por lo que se quiera, se va a regular, a intervenir, a decir lo que se tiene que hacer. ¡Ojo!, no estoy diciendo que las tarifas de móvil no deban ser reguladas, lo que estoy diciendo es que falta una estrategia que fije lo que es utilidad pública, interés general, y necesidades estratégicas.

Porque, ¿por qué se han de regular las tarifas de telefoníт­a móvil y no los precios de las lechugas?. Si alguien propusiera la regulación de los precios de las lechugas en los paíт­ses de la UE, al margen de que de esa persona se diríт­a que le patinaba el embrague, se diríт­a que los precios de las lechugas en los miembros de la UE son los que son debido a un sin número de motivos y, sobre todo, arguyendo que en el sistema económico vigente en la UE la fijación de precios es libre, por lo que si alguien encuentra caras las lechugas en su ciudad, que coma menos lechugas.

Sin embargo, con las tarifas de telefoníт­a móvil no se está aplicando la misma estrategia, no se está diciendo que la gente use menos su móvil si cree que las tarifas son elevadas. Curioso, ¿no?; ¿o no tiene nada de curioso?. (Desde aquíт­ manifiesto que las distintas variedades de lechuga son bienes de interés general y de utilidad pública).

Yo más bien creo que los tiros van por otro lado. Si las tarifas de telefoníт­a móvil -de todo para lo que el móvil puede utilizarse- bajan, la gente se pondrá muy contenta y consumirá más móvil. ¿Ven por dónde voy?.

Santiago Niño Becerra. Catedrático de Estructura Económica. Facultad de Economíт­a IQS. Universidad Ramon Llull.

@sninobecerra

Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.




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