La Carta de la Bolsa La Carta de la Bolsa

Vuelta a la normalidad o las cosas vuelven a ir bien (REV)

Santiago Niño Becerra - Martes, 07 de Enero

Pues sí: es el mismo texto de ayer; lo repito. ¿Por qué?, pues porque pienso es superfundamental. Si ayer se les pasó debido a que eran los Reyes y estaba jugando con el desintegrador fotónico hiperbárico que les han traído, pues nada: lo leen hoy; y si lo leyeron ayer, pues nada: lo repasan. 

¿Aún no se ha dicho la frase ‘España vuelve a ir bien’?. Tranquilos, es muy posible que a lo largo de los próximos meses vuelva a oírse. Existe una consigna a nivel gubernamental y de ciertas instituciones con un objetivo muy concreto: la venta de la idea de que la economía española se está recuperando, una consigna que tiene varios frentes de avance, una consigna que, curiosamente, la oposición denuncia con más o menos ímpetu, pero que no ataca, cuando lo tendría chupado.

Un frente. La reducción de la tasa de desempleo se ha convertido en un objetivo político al que se está supeditando cualquier cosa, como la calidad del empleo que reduce tal tasa de paro y el valor generado por esa población ocupada. El tiempo está haciendo buena aquella afirmación del Premier británico de que lo importante era tener un empleo independientemente de qué tipo de empleo se tuviera.

El Gobierno: este, otro, pienso, habría hecho lo mismo, está lanzando fuegos artificiales a partir de unos datos de un mes, Diciembre en este caso, que lo que de verdad dicen contemplados en su conjunto es que tras seis años de caída la Seguridad Social perdió en el 2013 más de 85 m cotizantes, y que de los cotizantes que se han incorporado en el año finalizado, casi 161 m lo fueron a tiempo parcial -¿deseaban hacerlo a tiempo parcial?- y que de los cotizantes perdidos más de 100 m lo fueron a tiempo completo.

Más: se está destruyendo ocupación en la industria que es un sector generador de más alto valor, y dentro de los servicios, en el subsector financiero, ídem anterior. Además, el 90% de los contratos firmados en el 2013 lo fueron en alguna modalidad de la contratación temporal. (Es curioso. Rebobinando: EL objetivo de la primera reforma laboral, la que se puso en marcha con el Sr. Celestino Corbacho como Ministro de Trabajo era reducir la tasa de temporalidad, y bueno, con los meses se fue reduciendo: los temporales eran los primeros trabajadores en ser despedidos).

Se hace bandera del contrato indefinido cuando hoy es más fácil y barato echar a la calle a un contrato de uno o dos años indefinido que tomarte un helado; a la vez que el Gobierno pinta un 2014 esplendoroso en el empleo sin haber modificado ni una décima las cifras que presentó en Octubre para elaborar los presupuestos.

El camino es claro: en una atmósfera de necesidad decreciente del factor trabajo, lo prioritario es ocupar a la mayor cantidad posible de gente durante las horas semanales que sean, haciendo lo que sea y obteniendo la remuneración que sea, procurando que la población activa que vaya siendo despedida vaya siendo sustituida por otra con unas condiciones laborales, al menos, semejantes a las que tenían la población ahora parada cuando estaba ocupada.

Se está vendiendo la idea de que el contrato por obra y servicio con el salario que se ofrezca es lo bueno, y vale, podría ser, pero añadiendo que es lo bueno porque no hay ninguna otra opción ni va a haberla porque la necesidad de factor trabajo es decreciente, y más la de factor trabajo generador de bajo valor añadido.

Otro frente. La mejora de la prima de riesgo. Sobre esto ya hemos hablado bastante, pero hay tema. ¿200 puntos se considera algo bueno y motivo para decir que se ha regresado a la normalidad europea?. Entonces, ¿qué habría que decir comparando esos 193 puntos que es la prima de riesgo de España del pasado Viernes 3 con la situación existente en el 2004 cuando la prima de riesgo del reino eran 4 (cuatro) puntos?. Tomando esa referencia y magnificando el valor simbólico de la prima de riego habría que decir que hoy, en relación al 2004, la economía española ha empeorado el 4.725%. La realidad pura y dura es que España, para que le compren la deuda a 10 años ha de pagar el 3,87% y que Japón, por ejemplo, ha de pagar el 0,9%.

La prima de riesgo española ha bajado porque Alemania ha de pagar más para que le compren su deuda y se espera que tenga que pagar más aún, y porque no conviene que la deuda de España se degrade más no sea que la tensión lleve a situaciones peligrosas: en el 2004 la deuda de España tenía una calificación de AAA y hoy casi es bono basura las razones para ‘la mejora’ de la prima está claro que no son la mejora de economía española.

Claro, claro, este Gobierno (otro, pienso, haría igual) juega con dos cosas a su favor: 1) la ciudadanía ya está cansada de oír cosas feas y tristes, y 2) la ciudadanía no va a rebotarse porque sabe que no hay opciones ya que no estamos en 1870.

Los mensajes de jolgorio van a seguir: elecciones en Mayo y auditoría bancaria en Noviembre, pero la realidad es tozuda y la economía española está donde está, y la desigualdad está creciendo y la sociedad dualizando.

¡Ah!, me olvidaba. La Seguridad Social española ya está en 1,95 cotizantes ocupados por cada pensionista, la relación más baja desde la década de 1990s; y como los salarios medios decrecen, la masa recaudada tiende a la baja. Pueden imaginar lo que va a ir sucediendo con las prestaciones por desempleo y con las pensiones.

¡Pero si! España se sigue recuperando. Esa es la consigna oficial. Lean, mediten, y analicen, aunque lo que salga no sea bonito.

(Las cifras utilizadas en este texto las he obtenido de las Págs. 18 y 19 de El País del 04.01.2014).

@sninobecerra

Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.




[Volver]