El gobernador del Banco de
Italia, Antonio Fazio, se ha caracterizado tradicionalmente por no
favorecer la presencia extranjera en las entidades del país
transalpino, lo que le ha supuesto algún interrogante al respecto por
parte de la Comisión Europea, temerosa de que se vulnerara el principio
de la libre competencia, según EFE.
Fazio
no ha hecho declaraciones públicas en estos días, pero ha llevado a
cabo una serie de contactos con compañías italianas para urdir un frente común con el que dificultar el proyecto del BBVA y que cuenta como principal valedor con el empresario Francesco Gaetano Caltagirone.
Mientras
tanto ha madurado una respuesta que supone un juicio a la presencia del
banco español en la BNL, donde junto a la aseguradora Generali (8,7%) y
el empresario Diego della Valle (4,9%) controla los órganos ejecutivos.
El
año pasado la BNL tuvo unas pérdidas de 34 millones de euros, un dato
que apoya la orientación crítica del Banco de Italia respecto a la
operación.
Esos obstáculos deben ser asumidos por el BBVA
para diseñar una estrategia, que puede pasar por mantenerse firme en su
deseo de controlar la BNL o modificar su actitud.