Jueves, 05 de Enero de 2006
Redacción
La onza de oro ha entrado en un movimiento de
vértigo. Después de aproximarse a los 550 dólares, el nivel más alto de
los últimos veinticuatro años, cae hasta los 520 dólares
para volver a remontar.
La especulación más atroz se ha
instalado en la Bolsa de metales alentada por la buena demanda
proveniente de India y del sudeste asiático.
Con el inicio del año, los futuros del oro han
vuelto a la carga acercándose a lo largo de la sesión a su nivel más
alto en tres semanas y marcando el nivel más alto desde 1981.
El oro de febrero alcanzó su máximo de sesión, en 533,20 dólares por
onza en el mercado de Nueva York, un nivel que no se veíÑ‚Âa desde el 12
de diciembre cuando los precios alcanzaron los 543 dólares, una máxima
intradíÑ‚Âa alcanzada hace casi 25 años.
No se trata, por tanto, de un fenómeno financiero fruto del miedo o del
temor a la inflación, porque el oro hace mucho tiempo que dejó de ser
patrón-moneda. Especulación pura y dura, con los fondos de alto riesgo
apalancados en la Bolsa de metales. Fondos que disparan contra todo lo
que se mueve y ahora toca el oro.
Los
futuros del oro siguen consolidando los máximos de 24 años por la
continuidad de las compras especulativas y de fondos, según los
expertos. En la división de metales COMEX de la Bolsa Mercantil de
Nueva York el oro para entrega en febrero han superado con holgura los
530 dólares la onza, el nivel más alto para un contrato referencial
desde abril de 1981, para luego bajar, y luego volver a subir. Los
precios han subido más de un 20% en lo que va de año. La debilidad del
dólar ha sido factor añadido en este proceso.
Se une el consumo
desaforado, con fines industriales, de las economíÑ‚Âas más pujantes.
India y China son los principales demandantes del oro, aunque no tanto
como para justificar este fenómeno.
Y
aprovechando el caso, los movimientos corporativos en el sector se
suceden. Lo último es que la canadiense Placer Dome, productora de oro,
ha aceptado la oferta mejorada lanzada por su compatriota Barrik Gold
por un importe de 10.400 millones de dólares, con lo que darán lugar a
la mayor compañíÑ‚Âa del mundo dedicada al tratamiento del metal precioso,
con una producción de 8.400 millones de onzas. Barrick realizó una
primera oferta hostil a 20,5 dólares por acción de Placer Dome, que ha
elevado a 22,50 dólares por tíÑ‚Âtulo.
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