Imprimir Artículo
El Banco de España mantendrá su ‘politización’
El final del mandato de Jaime Caruana como gobernador del Banco de España no ha modificado la politización de este cargo por parte de Gobierno y oposición.
El profesor Luis Ángel Rojo fue el último gobernador del Banco de España que aunó en su persona el consenso tanto de las fuerzas políticas mayoritarias, Gobierno y oposición, así como del resto del panorama político. Rojo representó lo que se esperaba de un respetado y eminente economista, a la vez que mantenía su independencia del poder político, obviando su tendencia o filiación ideológica y política. Ha sido el único. Ninguno de los que hemos escuchado durante tantos años sus discursos y analizado sus actuaciones podremos olvidar su rigor, su vigilancia de la vida económica del país o sus acertadas actuaciones en materia monetaria, cuándo la entidad tenía facultades para ello. Además, el sistema financiero español se benefició de la tarea supervisora y exigente del Banco de España, sin olvidar su exquisito papel en la integración de la economía española en el euro. Por todo ello no es de extrañar que un jurado compuesto por 18 premios Nobel y 80 autoridades de diferentes disciplinas galardonasen a Luis Angel Rojo con el Premio Jaime I en su modalidad de Economía.
Pero eran otros tiempos. Ahora le llega el turno a Jaime Caruna, quién pone fin a un mandato de seis años en el Banco de España. un organismo que mantiene la supervisión bancaria nacional, la orientación y crítica intelectual de la política económica y su cuota de participación en la política monetaria europea. Los preceptos para dirigir el Banco de España se olvidaron con su nombramiento. No en su rigor profesional, del que no planteamos duda alguna y que ha demostrado cumplir con elevada solvencia, pero si de su independencia política. No en vano, Caruana se incorporará al FMI junto a su mentor, el director gerente del FMI, Rodrigo Rato.
La salida de Caruana vuelve a colocar en la picota al próximo gobernador del Banco de España, que previsiblemente será Miguel Ángel Fernández Ordóñez. Nuevamente, un ‘político’ tomará las riendas de la supervisón bancaria y pondrá, por segunda vez, la falta de independencia de la entidad frente al poder del Gobierno de turno. En el Partido Popular no han desaprovechado la ocasión y también colocarán a un ‘político’ como subgobernador del Banco de España. El nombre de Elvira Rodríguez, ex ministra de Medio Ambiente, aparece con importantes probabilidades para ocupar este cargo.
En ambos casos, dejan en un mero titular la denominada Ley de Autonomía del Banco de España. Negociar el futuro del Banco de España debería quedar al margen de la crispación política algo, que ante la actual situación, dudamos. Parece que tendremos que esperar mucho tiempo paa encontrar a otro Luis Angel Rojo.
[Volver]