Los insiders conocen de primera mano cómo van las cosas en las empresas que dirigen y cuáles son las expectativas. Por eso, compran con antelación o venden sus acciones, siempre según lo que dicta y permite la legislación vigente. En situaciones de pánico vendedor como las que se han registrado en sesiones pasadas muy concretas, los insiders han comprado.
La pregunta que se hace el observador es si estas compras obedecen a una estrategia y convencimiento claros o, si por el contrario, todo es un gesto a la galeríÑ‚Âa. En el primer supuesto cabe apostar por una recuperación del mercado. Eso es, al menos, lo que esperan los máximos dirigentes empresariales. Otra cosa es que se produzca, que nadie tiene la bola de cristal.
Han reforzado sus posiciones en las empresas que dirigen durante los últimos César Alierta, Francisco González, Emilio BotíÑ‚Ân, Javier Tallada, Enrique Used, Felipe Benjumea, Lalo Azcona y una larga serie de otros máximos dirigentes
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