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¿Es usted un ahorrador o gastador compulsivo? Identifíquese con su personalidad monetaria

Carlos Montero - Miercoles, 05 de Mayo

A menudo hacemos hincapié en la importancia de la educación financiera, como obtener una sólida comprensión de cómo funciona el dinero y tener los recursos para tomar decisiones informadas. Pero cuando se trata de establecer una salud financiera, una cosa que la mayoría de las personas no tiene en cuenta es su tipo de personalidad monetaria, o su enfoque y respuestas emocionales al dinero. Cada uno de nosotros tiene sus propias creencias y emociones sobre el dinero, y en su mayoría están moldeadas por nuestras experiencias de vida individuales (por ejemplo, transmitidas por nuestros padres o influenciadas por nuestras situaciones actuales). 

El especialista en comportamiento humano Ken Honda, realizó una interesante investigación al respecto. Descubrió que hay siete tipos distintos de personalidad del dinero. Por lo general, caemos en una combinación de muchos tipos, y no solo en uno. Honda afirmaba en Make it: 

Identificar los tipos a los que pertenece y comprender las dificultades de cada uno puede mejorar significativamente su relación con el dinero. Puede ayudarlo a hacer cosas como gastar menos en compras impulsivas, ser mejor en el presupuesto, invertir sabiamente y garantizar una buena reserva para la jubilación. 

1. El ahorrador compulsivo 

Señales de que podría ser un ahorrador compulsivo: 

Guardas dinero sin cesar, a veces sin un objetivo final real en mente. 

Cree que ahorrar dinero es la única forma de sentirse más seguro en la vida. 

Eres muy frugal. (Los amigos a menudo acudirán a usted para pedirle consejo sobre qué compañía telefónica es la más barata, qué tarjetas de puntos valen la pena o cuándo comprar boletos de avión al precio más bajo). 

Escollos: algunos ahorradores compulsivos tienen tanto miedo de perder dinero que pasan toda su vida sin gastar nada de lo que tanto trabajaron para ahorrar. Por ejemplo, pueden optar por omitir pasatiempos o actividades que podrían brindarles felicidad y propósito. 

Consejo de dinero: se trata de moderación; aprenda a encontrar un equilibrio entre ahorrar dinero y disfrutar de la vida. Piense en dónde se ve en el futuro y cómo puede usar sus ahorros para llegar allí. 

2. El gastador compulsivo 

Señales de que podría ser un gasto compulsivo: 

Suele gastar dinero en cosas que no necesariamente necesita. 

Tienes una personalidad extrovertida y te encanta tratar a las personas con algo especial, a veces sin ningún motivo en particular. 

Cuando se encuentra en angustia emocional, su solución es gastar, especialmente para la gratificación inmediata. 

Escollos: incluso si tienen grandes cantidades de deudas, los Gastadores Compulsivos a menudo continuarán yendo de compras. Incluso pueden intentar ocultar grandes compras a amigos y familiares. En casos extremos, pueden correr el riesgo de quebrar si constantemente gastan más de lo que ganan. 

Asesoramiento monetario: la creación de un plan presupuestario le ayudará a ver las cosas desde una perspectiva diferente. Recuerde que comprar un automóvil nuevo (cuando ya tiene uno), por ejemplo, significa sacrificar dinero en cosas esenciales como ahorrar para la jubilación o saldar deudas. 

3. El generador de dinero compulsivo 

Señales de que podría ser un generador de dinero compulsivo: 

Crees que ganar más dinero es el secreto de la felicidad. 

Gastas la mayor parte de tu energía en tratar de ganar la mayor cantidad de dinero posible. 

Obtiene el placer de la aprobación y el reconocimiento de otras personas por su éxito financiero. 

Escollos: si bien los hacedores de dinero compulsivos generalmente están en un camino sólido para lograr la libertad financiera, pueden ingresar a un territorio peligroso si comienzan a descuidar relaciones importantes para priorizar el crecimiento de su riqueza (por ejemplo, elegir trabajar los fines de semana en lugar de pasar tiempo con sus seres queridos). 

Consejo de dinero: reconozca que hay más en la vida que dinero. Y si tienes una cantidad considerable de riqueza, dale un propósito ayudando a otros, ya sea que eso signifique donar a una causa importante o darte el gusto de esas vacaciones familiares de las que has estado hablando durante años. 

En el artículo de mañana publicaremos las otras cuatro personales monetarias que identifica el autor.  




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