Comentarios sobre el empleo

Santiago Niño Becerra - Martes, 04 de Octubre

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Hace unos días recibí un mail. 

“Una breve nota sobre su artículo "Millenials" . Breve, acertado y condensado. El enlace al vídeo comercial de la marca de cerveza me ha "revuelto" el estómago (me lo han revuelto sus autores). Mercantilizan y presentan como algo positivo el que la gente se busque la vida (se reinvente, nueva palabra, viejo concepto ) aceptando un estado de casi adolescencia hasta no se sabe cuándo.

Mi historia laboral desde mayo del 2010:

Despido improcedente después de 12 años y 8 meses en la misma empresa.

7 meses en Francia en una empresa de un sector distinto.

4 meses en Francia en otra empresa del mismo sector que la anterior.

12 meses en España buscando empleo.

2 días de trabajo en España en una empresa del mismo sector que la última.

4 meses en España buscando empleo.

5 meses de trabajo en España en una empresa del mismo sector que la última.

1 día de trabajo en España en una empresa del mismo sector.

Desde el 15 de noviembre del 2015 trabajando en Francia de nuevo y en el mismo sector que la última.

Tengo una hija de 19 años, ¿Le tengo que decir que esta va a ser su vida laboral? ¿A esto le llamamos trabajo "por objetivos", "flexibilidad"?

Como usted dice: lo que se necesite y SOLO cuando se necesite.

¿El resto de los 12 meses del año?”

Mi respuesta fue:

“Su hija … Si es muy, muy buena en algo que sea necesario en aquel momento (por ejemplo, hoy lo son biólogas/os especializados en investigación de proteínas, ADN, modificaciones celulares, …) y si tiene contactos, tendrá posibilidades profesionales. Sino sólo tiene la opción de especializarse en algo y ser muy buena en ese algo, y establecerse como profesional libre: especialista en fotografía nocturna de elementos industriales, …; y utilizar Internet para darse a conocer o disponer de contactos. Si se es muy, muy buen profesional en un campo en el que hay muy pocos, trabajo no falta porque el boca-oreja hace llegar los clientes; entonces no se tienen períodos vacíos, pero la cruz de esa moneda es que no se puede decir nunca ‘no’ porque se adquiriría la imagen de ‘no confiable’.

A esos profesionales añada unos cientos de miles de personas a nivel mundial que serán parte de la escasísima plantilla de las grandes corporaciones que dominarán la mayoría de la producción y del comercio planetario; unos profesionales de gran capacidad, bien remunerados, con vivienda (donde corresponda en cada momento) y con plan sanitario y de pensiones a cargo de la corporación, aunque sin horario y prácticamente sin vida privada; y considerando que muchas de esas personas ya estarán amortizadas a los 45 años, dedicándose otros cinco a formar a quienes les sustituirán.

El resto, subempleo y paro estructural. De ahí la importancia de la renta básica.

Los jóvenes son los grandes olvidados, pienso que de forma consciente: tienen unas muy malas expectativas y su voto cada vez va a ser menos necesario”.

Los grandes olvidados.

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@sninobecerra

Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.

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