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El toro que ya pasó

Santiago Niño Becerra - Miercoles, 02 de Abril Es otra forma de decir "A toro pasado".

Se dice: “A toro pasado es muy fácil”, ¿qué?, pues decir que algo se ha hecho mal o que deberíт­a haberse hecho de otra manera. Y es cierto: es fácil, pero las cosas casi nunca aparecen porque síт­, casi nunca se producen porque si: existe una cosa llamada tendencia que va mostrando -va mostrando- lo que va sucediendo y como va sucediendo.

Ahora todo el mundo se lleva las manos a la cabeza y se pregunta cómo se ha podido llegar a la situación a la que ha llegado el nivel de endeudamiento de los protagonistas e implicados en el subsector de la construcción; ahora, pero durante años TODOS han ido viendo que LA TENDENCIA no hacíт­a más que mostrar que la situación se iba tornando insostenible, inasumible, ilógica, terroríт­fica. Pero se callaba porque beneficiados ha habido, y muy beneficiados.

Son cifras elaboradas con datos del Banco de España y se refieren al reino. Entre mediados del 2003 y finales del 2007, el crédito concedido a los protagonistas del ladrillo creció el 171%. Desglosando: en ese períт­odo de tiempo, la pasta prestada a las familias aumentó el 134%, la dejada a las compañíт­as constructoras creció el 147%, y la concedida a los promotores inmobiliarios aumentó el ! 327%. La tendencia es al alza, constante, durante el períт­odo referido, pero hay un año clave: el 2005: desde sus inicios se produce, aún, más desmadre crediticio.

Ahora llega “el llanto y el rechinar de dientes”: otra tendencia: los impagos de créditos: creció el 50% en el 2007. La pregunta del billón: ¿por qué se ha llegado a esta situación?; la respuesta es fea, aunque lógica: se buscaba, se necesitaba, se queríт­a, MAS. Las compañíт­as inmobiliarias (del subsector) buscaban más beneficios, el reino necesitaba más crecimiento, las entidades financieras queríт­an más rentabilidad. El crédito: esa era la solución, la herramienta, el método: pido prestado, me prestan, te presto, prestas; pasta, materiales. Se ha estado vendiendo tiempo y se ha estado comprando confianza: la economíт­a ingrávida; pero si un globo se carga demasiado no asciende, o desciende; ya no digamos que sucede si se produce una rasgadura: ¡pffffffffffff!.

¡Lo sé, lo sé!, a toro pasado es muy fácil, pero la tendencia ! Una de las cosas más curiosas del Modelo de Oferta, de la variante del Capitalismo que se inventó y se puso en funcionamiento a finales de los 70, fue la introducción de aquella cosa llamada “riesgo moral”, muy USA, ella. “Ud. haga lo que crea que debe hacer, pero si la caga, asume las consecuencias”. Salvaje, se dijo; si porque se ha estado aplicando selectivamente: el doble rasero, pero no porque de entrada se admitió que habíт­a casos en que era ¿inaplicable?: ¿se acuerdan de LTCM?, ahora se está hablando mucho de él (Google: 289.000 referencias).

¿Puede quebrar una entidad financiera?. ¡Claro!; ¿seguro?; ¡mmmmmmm!. Quiebras de bancos: colas de gentes ante oficinas bancarias: The Great Depresión. Northern Rock no quebró, Bear Stearns tampoco. Claro, claro ! el Estado. ¿Tiene suficiente pasta el Estado para evitar que quiebren entidades financieras que deberíт­an quebrar?. ¡Síт­, síт­!: las implicaciones ! Pero, ¿y el riesgo moral?. Han estado haciendo lo que han querido, se han estado forrando, y ahora se les sostiene a pesar de que se admite que la han cagado. Pero han propiciado que se creciera, que el PIB aumentara, que se creara empleo, que se consumiese: han dado créditos. Bueno, no sé !, pero, ¿cuánto tiempo podemos aguantar?. Poco. La gente las va a pasar putas, pero al final de las historias la gente siempre las pasa putas: es el destino de la gente. El problema es que aunque en todos los sitios se pasarán putas, en algunos se pasarán aún más, por ejemplo, aquíт­: el ladrillo y colaterales generan el 30% del PIB.

Entre tanto -a la vez- el Gobernador del Banco de España ¿desmiente? (en menos, claro) al Gobierno en el 0,6% este año y en el 0,9% en el próximo. El Gobernador también tira con elevación, pero se acercará más: ya conocen Uds. mis previsiones: la última: 1,6% para el 2008 (el Sr. Isidre Fainé, el presidente de La Caixa, 2%). ¿La inflación?, bajará, síт­: el crecimiento del reino es inflacionario porque nuestra productividad es patética (¿se han dado cuenta de que ahora, ni la madre de la productividad habla de ella?), luego, a menos crecimiento, menos inflación. ¡Que bien!, ¿no?.

Y cuando el toro ya ha pasado, ¿qué queda?. Buena pregunta, ¿verdad?.

No cambio de tema. Lo que viene es copia literal de parte del boletíт­n que semanalmente edita Morgan Stanley, es el de la semana del 24 al 28 de Marzo (me lo pasa un antiguo alumno): “Goldman publica un informe diciendo que las pérdidas globales por bonos hipotecarios podríт­an superar el billón de dólares”. Hace cuatro díт­as se hablaba de 300.000 millones y parecíт­a una aberración. ¿Cuál será la verdad?, y, ¿dónde está?).

De ahíт­ (entre otras razones) los cambios en el sistema financiero USA (aviso a navegantes). Y podemos llamarle chiripúm, pero esos cambios suponen más regulación porque suponen una nueva estructura (ojo al concepto) de mayor calidad operativa: facultará a FED para dar cachetes a quienes hagan cosas feas. ¡Si Ronald Reagan levantase la cabeza!.

Santiago Niño Becerra. Catedrático de Estructura Económica. Facultad de Economíт­a IQS. Universidad Ramon Llull.

@sninobecerra

Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.




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