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Precios

Santiago Niño Becerra - Martes, 11 de Diciembre Todo sube su precio, todo; ¿todo?.

En la portada de la página http://www.msn.com del díт­a 29 de Agosto (hace díт­as de esto, lo sé, pero una charla que tuve con alguien no hace mucho, ha vuelto a poner de actualidad el asunto), en esos flashes que van apareciendo y sustituyendo al anterior y en los que se anuncian empresas y actividades, uno destacaba, era de la compañíт­a Dell. Les incluyo el link, aunque puede que hoy no esté ya activo: http://www.dell.com/content/topics/segtopic.aspx/odg/hip_msn?c=us&l=en&s=bsd&cs=04&trigger=e&mboxSession=1188366644933-355101 .

El flash decíт­a que, tan sólo por un díт­a: el 29 de Agosto, podíт­a adquirirse un ordenador de sobremesa de la marca por 379 dólares y un portátil por 499. Pensarán Uds. que las configuraciones de ambos ordenadores seríт­an una mierda, pues no, en absoluto; evidentemente, no eran las más potentes que hoy pueden ser adquiridas, pero les aseguro que eran más que suficientes para que el 99% de los mortales pudieran hacer el 99% de las cosas que con un ordenador hacen.

Los precios de las lechugas, de los combustibles, del pan y de la leche, de los restaurantes y de los hoteles, asíт­ como los de otros muchos bienes no cesan de aumentar, pero los de la electrónica y, en concreto, los del hardware, no paran de bajar; pero esto hay que aclararlo.

Hoy, en moneda constante, un ordenador cuesta muchíт­simo menos de lo que costaba hace cinco años, es decir, para adquirir un ordenador hay que poner encima de la mesa mucha menos pasta de la que habíт­a que poner hace cinco años, tanto descontando la inflación, como no descontándola.

Pero, a mayor abundamiento, y eso es lo que es más sorprendente, por esa menor cantidad de pasta que hay que poner encima de la mesa, se obtiene un ordenador con unas prestaciones que son infinitamente superiores a las que brindaba un ordenador de hace cinco años; de entrada, porque hace cinco años no existíт­a un ordenador como el que hoy se obtiene, pero, además, porque los precios de los ordenadores han pegado una bajada en vertical. (Culturilla: este mayor abundamiento es lo que técnicamente se conoce como “precios hedónicos).

Los precios del hardware -y los del software, aunque no exactamente por los mismos motivos- llevan años experimentando caíт­das fortíт­simas de un mes para otro. Eso es debido a que se fabrica en los lugares donde es más barato fabricar, naturalmente, pero, además, ese descenso en los precios de los ordenadores está viniendo motivado por los espectaculares incrementos que está teniendo la productividad en su fabricación y que también está experimentando la elaboración de sus componentes; acompañando a eso, también se está produciendo mejoras continuadas en la logíт­stica del hardware.

Y claro, la pregunta es: ¿dónde se halla el líт­mite de los precios del hardware?. Sinceramente, pienso que ese líт­mite se encuentra en cero. “¿En cero?”, exclamarán, síт­, en cero. El hardware, cualquier hardware, aunque de momento, sólo sea algún hardware, ya es una commodity, pero una commodity que tiene una caracteríт­stica que la diferencia de la mayoríт­a de commodities: su uso genera un consumo, creciente, en muchos casos, de otras cosas, consumo que puede ser objeto de negocio.

¿Ven por dónde voy?. Un ordenador no es hoy un fin en si mismo, es una puerta hacia otros mundos, mundos en los que, para hacer cosas, puede que se instituya el pago, el pago por acceder al uso de los elementos de esos mundos. Pensando asíт­, el ordenador es una herramienta imprescindible para usar lo que esos mundos puedan ofrecer, por lo que, lo lógico, es que esas herramientas sean ultrabaratas e, incluso, que sean gratis. De ahíт­ que, a mi entender, cero sea el líт­mite al que el precio de los ordenadores puede llegar. El tiempo dirá.

(En esta líт­nea, no entiendo como el precio de los terminales de telefoníт­a móvil no es ya de cero unidades monetarias, es decir, no entiendo como los móviles no son ya gratis; pero no algunos móviles, sino todos los móviles).

Al cabo de un tiempo, el link que les incluyo se lo remitíт­ a un distribuidor de productos informáticos de reconocidas marcas que conozco desde hace años; simplemente se lo envié recomendándole que le echase un vistazo. Transcribo su respuesta de hace unos díт­as:

“En mi opinión, es el puro reflejo de un mercado sin ley y encabezado por una pandilla de impresentables, (los fabricantes) que si bien es cierto están ganando dinero a montones, también están consiguiendo destrozar toda la distribución. ¿A dónde van a parar?. Seguramente a las grandes superficies, como si de un electrodoméstico mas se tratara… Imagino que ese será el final de un producto, que visto desde el lado profesional, nada tiene que ver con un lavaplatos o un aspirador… pero por desgracia ese será su final.
No es necesario ir a Dell, todas las marcas están haciendo estas barbaridades y digo barbaridades, porque a pesar de conseguir un precio excelente, el cliente también acabará consiguiendo un penoso servicio: el del fabricante”
).

Pues eso.

Santiago Niño Becerra. Catedrático de Estructura Económica. Facultad de Economíт­a IQS. Universidad Ramon Llull.

@sninobecerra

Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.




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