La Carta de la Bolsa La Carta de la Bolsa

“En la hoguera de la Bolsa se han multiplicado las ejecuciones. Un buen indicador de tendencia…”

Daniel Martínez - Lunes, 29 de Septiembre

garantias“Llegué a ser un descarado de tal magnitud que creí que ya nadie podría hacerme nada, hasta que llegó el día del enredo fatal en la plaza bajo los soportales, un embrollo que me demostró que cuanto más arriba se está más fuerte es la caída, que siempre hay una gota que colma el vaso, que no hay que sobrepasar los límites porque después vienen las lágrimas, que a Ícaro se le quemaron las alas. El hombre quisiera ser un gigante pero es una mierda, amigo mío. No deberíamos recordar que la prudencia es la madre de la ciencia y que los excesos se pagan. Tras las bacanales y las orgías viene el arrepentimiento. Es ley de vida, amigo…También Cartago fue destruida, Nínive fue reducida a cenizas, amigo, pero ¡adelante con la cabeza bien alta! ¡Que nadie se piense que, si me envían al frente, yo dispararé un solo tiro!...” Es un fragmento de Las aventuras del buen soldado Svejk, escrito por Jaroslav Hasek (1883-1923). El ejemplo del auge y caída de la especulación en el ladrillo español ha sido contundente..."

"Lo mismo puede extrapolarse a otras familias, que se enriquecieron en la Bolsa gracias al apalancamiento, pero que se han arruinado, porque los bancos les han exigido garantías. Hoy, no obstante, el mundo financiero, en general, y la Bolsa, en particular, repara en que el mal ya está hecho y que la ejecución de garantías prácticamente ha finalizado, lo que está provocando un efecto a la inversa: la recuperación de los precios de muchas acciones, que se han visto atenazadas por este fenómeno, sin tener en cuenta sus fundamentos. Digamos que la Bolsa española está muy saneada, muy limpia de malas prácticas y de cotizaciones artificiales”, dice el estratega de una de las principales gestoras de fondos nacionales.

 

La deuda financiera de las familias se ha reducido en casi 100.000 millones de euros desde que arrancara la crisis, según el último número de Cuadernos de Información Económica, editada por la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas). El análisis explica que se trata de un proceso de desendeudamiento que se debe en parte a las correcciones del mercado inmobiliario y a la restauración de la estabilidad financiera de los últimos meses.

En un artículo de los profesores Santiago Carbó y Francisco Rodríguez se recuerda que la deuda financiera de las familias aumentó de 653.400 millones de euros en 2005 a 913.400 millones en 2008, y posteriormente disminuyó hasta los 822.800 millones en el primer trimestre de 2013. En términos de PIB, la deuda de los hogares pasó del 71,9% en 2005 al 86,5% en 2009 y en el primer trimestre de este año se situaba en el 78,6%.

Sin embargo, los autores advierten de que el proceso de desapalancamiento será "largo", ya que los caminos naturales para reducir la deuda, como la venta de vivienda o amortización anticipada de préstamos, aún no parecen "viables" por la elevada tasa de paro y la caída del valor de los inmuebles. Precisamente, José García Montalvo analiza en otro artículo el significativo incremento de compradores que actualmente paga en contado la compra de una vivienda. Según datos del Consejo General del Notariado, el 70% de las transacciones inmobiliarias se realiza sin mediar préstamo hipotecario.

Entre las razones que explican este fenómeno se encuentran la reducción del precio de las viviendas, las mayores dificultades para conseguir un préstamo hipotecario y el aumento de compradores que adquieren la vivienda como inversión ante la escasa remuneración de otras opciones. Por otro lado, Joaquín Maudos subraya que el coste para el contribuyente de las ayudas totales para sanear el sector financiero supone en forma de déficit público el 3,8% del PIB, después de que la Comisión Europea considere perdidos 39.600 millones de euros.

El autor pone de manifiesto que la banca española ha recibido ayudas públicas mediante capital por un importe de 54.000 millones, esto es, un 5,2% del PIB. Estos niveles se sitúan en la media de la UE. Ahora bien, a estas ayudas hay que añadir los conocidos como pasivos contingentes (compra de activos o concesión de avales por parte del Estado), que suman otros 105.000 millones, un 10% del PIB, un porcentaje que duplica la media europea.

Por último, Ángel Laborda y María Jesús Fernández aseguran que la economía española sale de la recesión, pero "con lentitud" ante el lastre del endeudamiento público. Ante los últimos datos macroeconómicos, los autores apuntan que la senda de estabilización se ha mantenido en el tercer trimestre del año, en el que probablemente ya se registrará una tasa de crecimiento positiva. Así pues, las previsiones de crecimiento del PIB para este ejercicio y 2014 se sitúan en el -1,2% y 1%, respectivamente.

 




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