La Carta de la Bolsa La Carta de la Bolsa

“¿En qué quedamos? ¿Es bueno o malo el envejecimiento de la población para las Bolsas?...”

Mar Revuelta - Miercoles, 30 de Diciembre

"No se pone de acuerdo", me dice Alonso P. analista de Bolsa. "Unos dicen que el envejecimiento de la población es malo para las Bolsas y otros, lo contrario. Hace tres años, se puso en marcha, en varios países europeos (Francia, Italia, España...) el mecanismo de elevar progresivamente los años de jubilación y alguno se preguntó si tiene sentido la disparidad de fechas cuando el envejecimiento de la población es un importante reto para la sostenibilidad de las cuentas públicas y partiendo de que esta sostenibilidad es imprescindible para la propia supervivencia del Euro. El mejor ejemplo, la discrepancia entre la situación fiscal de los países y las tensiones que esto provoca. Hace tres años, el BCE publicó un análisis sobre el fenómeno, que sigue vigente. Así, para el conjunto del área la tasa de dependencia (población de más de 65 años sobre la población de 20 a 64 años) podría suponer el 58.4 % en 2060 desde el 30.1 % actual. La Comisión Europea considera que los gastos relacionados con el envejecimiento de la población (pensiones, sanidad, cuidados de larga duración y educación) podrían aumentar en 4.8 puntos del PIB en el periodo considerado de 50 años, especialmente a partir de 2020. Más de la mitad de este año se registrará en pensiones..."


"Los retos a largo plazo derivados del envejecimiento de la población abarcan desde el menor crecimiento potencial (ingresos) hasta el comentado ya mayor aumento del gasto. Y todo ello cuando la situación de partida, la debilidad de las finanzas públicas y elevados niveles de deuda, limita el margen de maniobra para absorberlo. La simulación de la Comisión Europea supone que la deuda pública podría subir hasta el 200 % del PIB en 2060 (superaría ya claramente el 100 % en 2030) si no se adoptan medidas de control.

Las recomendaciones del BCE para acomodar estos retos son:


*   Subidas de cotizaciones del trabajador y/o reducción de las pensiones. También podría optarse por un ajuste automático de la edad de jubilación en función de parámetros como la esperanza de vida y otros factores demográficos.


*   Acumulación de activos por los gobiernos como reserva para el pago futuro de pensiones


*   Mejorar la eficiencia en términos de costes para la atención sanitaria y asistencia de larga duración, incluso la mejora en la distribución de costes


*   Reformas tendentes a aumentar el crecimiento potencial

 

 

Y la cara amable

¿Una vía para invertir en renta variable europea con un enfoque conservador, que ofrece una diversificación distinta y un enfoque original? Un fondo que reúne estas tres características es el CPR Silver Age. Este producto perteneciente a Amundi ha experimentado un extraordinario crecimiento a lo largo del último año, hasta alcanzar un volumen de activos gestionados de 1.300 millones de euros. Por ello CPR – filial de la francesa- está redirigiendo la estrategia de marketing del producto para dirigirlo a nuevos mercados – el fondo es muy popular en Francia-, al tiempo que ha empezado a promocionar otro fondo gestionado con la misma filosofía pero un universo de inversión más global, que de momento cuenta con un track record de un año. 

Clément Maclou cogestiona este producto junto con Vafa Ahmadi. De visita en España, explica algunos de los cambios introducidos en la cartera en los últimos seis meses (ver actualización anterior). Antes, recuerda los principios fundamentales del fondo: proceso de selección top down, cartera concentrada, enfoque buy & hold y sesgo hacia empresas de mediana capitalización. 

A partir de un estudio de los patrones de consumo de los mayores de 65 años, el equipo gestor ha delimitado ocho sectores en los que pueden encontrar compañías en las que las ventas a la tercera edad supongan al menos un 20% de sus beneficios, por lo que participan plenamente de una temática, la del envejecimiento de la población, que según los organismos internacionales va a crecer a un ritmo anual del 3% hasta 2040 en Europa y que, en palabras del experto, “es predecible, no cíclica”. “En un mundo de baja inflación y bajo crecimiento del PIB, es una fuente de retornos que permite invertir de forma original en Europa”, añade. 

 Más información: Cecilia S. Prieto/Funds People




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