Moralejas de la crisis griega (más).

Santiago Niño Becerra - Lunes, 24 de Agosto

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Varias:

1) En general, la opinión de lo que antes se denominaba ‘el pueblo’ cada vez cuenta menos: el pueblo puede votar libremente, pero su opinión no detiene lo que es considerado importante. (Evidentemente alguien podría decir que el pueblo no debería votar aquello que se considere importante).

2) ‘Lo que hay que hacer’ hay que hacerlo y como hay que hacerlo dando igual el color político de quien/es lo haga/n.

3) En todos los órdenes de la vida, pero sobre todo en economía, existen ‘lideres’ y ‘seguidores’. Los líderes delimitan, acotan, diseñan y ordenan; los seguidores asienten, acatan, hacen y obedecen

4) Nadie quiere romper ninguna baraja porque entonces no se podría jugar, y para que siga habiendo negocio es preciso continuar jugando.

5) Lo que antes eran ‘avisos a navegantes’ ahora son avisos también para quienes no navegan, es decir, para todos los Gobiernos y todas las ciudadanías de todos los países del globo.

6) Cuando ‘lo más tarde en Octubre’ se empiecen a aplicar en Grecia los nuevos recortes y las nuevas limitaciones, quedará claro que las ciudadanías son capaces de aguantar, de sportar, de aceptar, mucho más de lo que cada uno de los ciudadanos imaginaba, por lo que todas ciudadanías tendrán que tomar nota de ello para cuando les llegue su turno.

A Grecia no se la ha expulsado del euro porque no interesaba ya que se hubiese roto una baraja. Se le ha hecho ver que era conveniente que hiciese algo, independientemente de lo que dijese su ciudadanía porque lo que su ciudadanía había dicho no era importante. Y eso que era conveniente ha sido firmado por un Gobierno que no estaba de acuerdo con la propuesta y que recomendó a su ciudadanía votar ‘No’.

Del color que sea y en botella blanca … Malibú.

@sninobecerra

Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.

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