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Por qué Trump plantea el “mayor riesgo” para la economía global

Carlos Montero - Jueves, 29 de Diciembre

Basta con mirar el mercado de valores: Los inversores creen claramente que las políticas de Donald Trump darán un impulso inmediato a la economía de los Estados Unidos. Pero más allá de las fronteras de Estados Unidos, la perspectiva es mucho más sombría.

Trump se está mudando a la Casa Blanca en un momento en el que la economía global está sometida a fuertes tensiones: el crecimiento del comercio se está estancando, China está pasándolo mal para implementar difíciles reformas y Europa está siendo sacudida por la inestabilidad política.

Si el presidente electo sigue sus promesas de campaña, los analistas dicen que podría empeorar cada uno de estos problemas.

Esta es una nota sobre cómo Trump podría afectar la economía global (vía Ivana Kottasova, CNN):

Comercio más débil

Han pasado ocho años desde que el mundo sufrió la crisis financiera. Pero las economías todavía están intentando curarse.

El Fondo Monetario Internacional espera un crecimiento global de sólo el 3,4% en 2017. La economía mundial creció alrededor del 5% en los años previos a la crisis financiera.

Advirtió que las restricciones al comercio y la inmigración defendidas por Trump dificultarían aún más el crecimiento mundial.

Trump ha amenazado con romper acuerdos de libre comercio y adoptar enormes aranceles sobre China y México. Si lo hace, el crecimiento mundial se reducirá al 2,2% en 2017 y el 2% en los próximos dos años, según Oxford Economics.

"Frenar el comercio sólo puede profundizar y prolongar la actual crisis de la economía mundial", dijo Maurice Obstfeld, economista jefe del FMI. Por ejemplo, la OCDE advierte que la agenda anti-comercio de Trump corre el riesgo de anular el impulso de su programa de estímulo fiscal.

Y Moody's ha calculado que los aranceles de Trump sobre México y China aumentarían el precio de los bienes importados a los Estados Unidos en un promedio del 15%.

"Si avanza con sus políticas proteccionistas, Trump representará el mayor riesgo para la economía global", dijo Gregory Daco, jefe de economía estadounidense de Oxford Economics.


Desacelerando China

Trump ya ha sufrido algunos encontronazos con la diplomacia china. La postura de confrontación corre el riesgo de dañar la relación comercial más importante del mundo en un momento en el que ambos países se enfrentan a la incertidumbre económica.

En China, el crecimiento económico ya se está desacelerando a medida que Beijing implementa reformas diseñadas para impulsar el gasto de los consumidores y revisar el sistema financiero del país.

Las exportaciones chinas han estado cayendo, pero el país todavía envió 410 mil millones dólares de mercancías a los EE.UU. en 2015. Si Trump implementa los aranceles prometidos durante la campaña, los beneficios obtenidos por los propietarios de las fábricas podrían ser aniquilados.

Tim Wu, dueño de una fábrica de latas en Dongguan, dijo que sus productos tienen un margen de beneficio de sólo el 10%.

"Sufriremos un gran impacto", dijo a CNNMoney en noviembre. "Nuestro precio aumentará, y si nuestros clientes no pueden aceptarlo, no podremos seguir fabricando en China. Tendremos que trasladar la fábrica al extranjero".

Daco, el economista, estimó que el crecimiento del PIB de China se desaceleraría a menos del 5% si Trump sigue con los aranceles propuestos.

"Un factor importante que sustenta la moderación ha sido la creencia de que ambas partes se pondrán de acuerdo porque la relación bilateral de comercio e inversión es demasiado importante para ponerla en peligro", escribieron los analistas de Control Risks sobre las relaciones entre Estados Unidos y China.


Brexit y una Europa inestable

Europa estaba deseando tener un aliado fuerte en la Casa Blanca, pero Trump fue una animadora importante para el voto que empujó a Gran Bretaña a salir de la Unión Europea. Incluso describió las elecciones estadounidenses como un "Brexit plus plus plus".

Como presidente, Trump tendrá la oportunidad de influir aún más en la inestable situación política del continente.

A principios de este mes, los votantes en Italia rechazaron al establishment político del país dando su negativa a la reforma constitucional. El primer ministro de Italia renunció, aumentando el riesgo de que pudiera salir de la eurozona.

Y podríamos sufrir más inestabilidad en un futuro: Alemania y Francia celebrarán elecciones importantes en 2017.

Trump ya se ha comprometido a abandonar el Tratado Transatlántico de Comercio e Inversiones (TTIP), un acuerdo de libre comercio entre los Estados Unidos y Europa en el que se lleva años trabajando.

Las potencias europeas también están vigilando de cerca la relación de Trump con Rusia. Si suaviza las sanciones contra Moscú podría desestabilizar a los aliados de la OTAN en Europa del Este que están preocupados por un resurgimiento de Rusia.




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