LOS RUMORES CORPORATIVOS ENTIERRAN EL MITO DE QUE SEPTIEMBRE ES MALO PARA LA BOLSA

Julio Muñoz - Sabado, 16 de Septiembre

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El mes de septiembre suele ser históricamente negativo salvo honrosas excepciones como las de los dos últimos años. Los titubeos de la semana pasada hacían pensar que este año iba a recuperar su tradicional fama de mes bajista, sin embargo, las bolsas españolas no parecen dispuestas a cumplir con la tradición. De hecho, los inversores no han tardado en superar el miedo a nuevas subidas de tipos de interés en Europa y Estados Unidos gracias a la progresiva moderación del precio de la energía, a los favorables indicadores económicos y, sobre todo, a las constantes especulaciones sobre movimientos empresariales. Los rumores han salpicado de forma indiscriminada al mercado, provocando continúas reacciones al alza que han llevado de nuevo a los indicadores hasta zona de máximos anuales.

El mercado ha recogido además con satisfacción el descenso de las presiones inflacionistas reflejado en estos días por los indicadores económicos, lo que aumenta las posibilidades de que las autoridades monetarias de uno y otro lado del Atlántico terminen por mantener sus tipos de interés de referencia. A lo largo de la semana los datos de IPC que se han ido publicando vienen confirmando una progresiva moderación que invita a ser optimista de cara al corto plazo. Con todo, el BCE se mantiene en sus trece y asegura que se mantiene vigilante ante los riesgos de los precios porque son necesarios varios meses para dar por sentado que las presiones inflacionistas han dejado de existir.

 

La constante caída de los precios del crudo, en cualquier caso, ha rebajado las declaraciones en este sentido. El barril de crudo ha caído a cerca de 62 dólares, su nivel más bajo en seis meses, y aunque continúa estructuralmente alto, los precios actuales son mucho más manejables para las principales economías mundiales. Es más, se empieza a temer una brusca caída de los precios  porque empezaría a reflejar graves síntomas de recesión.

 

En casa y en el terreno empresarial, el interés especulativo ha marcado la evolución de los valores y del mercado especialmente en el caso de las compañías energéticas. El posible acuerdo entre España y Alemania para facilitar la opa de E.On ha llevado a especular con la posibilidad de que para garantizar la fortaleza del sector eléctrico español se potencia una eventual fusión liderada por Iberdrola. También se ha rumoreado respecto a una posible opa sobre Aguas de Barcelona o que Corporación Mapfre salga de compras en Europa. Rumores que han agitado al alza al mercado con un gran número de valores en zona de máximos históricos.

 En este contexto, el índice Ibex 35 ha subido un  1,63 por ciento en el balance general de la semana para quedar en 12.278,40 puntos a sólo 20 décimas de punto de los máximos anuales de principios de mes.  

 

Los destacados de la semana

El sector energético ha llevado la voz cantante de las compras a lo largo de la semana después del posible acuerdo entre Alemania y España respecto a la opa de E.On sobre Endesa que podría repercutir favorablemente en el resto de compañías. Iberdrola ha subido un 7,91 por ciento en la semana, seguida de Unión Fenosa con una mejora del 7,74 por ciento. Ambas compañías cotizan en máximos históricos. En estas cinco últimas sesiones también ha destacado Iberia con un alza del 7,14 por ciento ante las expectativas de mejoría del sector y las favorables recomendaciones. Antena 3 ha sido el peor valor del selectivo con una caída acumulada del 2,86 por ciento. Por detrás se ha situado Acerinox al caer un 2,49 por ciento y Repsol ha ocupado el tercer lugar. Las acciones de la petrolera han perdido un 2,18 por ciento en la semana al acusar negativamente el progresivo descenso del precio del crudo. 

Agenda de previsiones

La semana próxima no se presenta especialmente cargada de indicadores económicos en los mercados financieros internacionales. En cualquier caso, tampoco faltarán citas importantes de las que habrá que realizar un especial seguimiento.

En la sesión del lunes, festivo en Japón, la atención se centrará en la producción industrial de la zona euro, de la que se espera un crecimiento de tres décimas de punto, hasta el 4,3 por ciento en tasa interanual. Un día después, será el índice de confianza que elabora el instituto económico alemán ZEW el que marque la pauta de los mercados junto a las cifras de permisos de construcción y casas iniciadas en Estados Unidos y, sobre todo, a los precios de producción que llegarán desde el país norteamericano. Uno de los últimos datos clave de cara a la reunión de la Reserva Federal del miércoles.

El jueves, desde la otra orilla del Atlántico llegará dos importantes datos: el índice de indicadores, que anticipa la evolución de la economía en los próximos meses, y el índice de actividad de la Fed de Filadelfia. La semana se cerrará con las única referencia de los pedidos industriales de mes de julio en la zona euro. A lo largo de la semana, aunque sin fecha fija, se conocerán también los precios industriales del mes de agosto en Alemania.

  


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