El incierto futuro de Iberdrola

Ayer conocíт­amos los detalles de una de las operaciones más importantes del panorama energético europeo, la OPA de E.On sobre Endesa, maniobra que deja en incómoda posición a la dirección de Iberdrola.

La OPA de E.On sobre Endesa ha hecho saltar todas las alarmas en el sector eléctrico, en general, y más concretamente en Iberdrola. La actuación de la empresa alemana ha colocado en una difíт­cil situación al vicepresidente y consejero delegado de Iberdrola, Ignacio S.Galán, ante posibles asaltos de otras empresas al sector energético español.

El panorama abierto para nuevas actuaciones en el sector energético nacional se comprobó ayer, al observar la evolución de la acción de Iberdrola, que cerró la jornada con un avance del 6,19%. Este importante avance es fiel reflejo de la idea generalizada que ayer recorríт­a el mercado: la posibilidad de nuevas operaciones de concentración con un elevado protagonismo de Iberdrola.

La actitud de Ignacio S.Galán ante la OPA de Gas Natural sobre Endesa no le ha granjeado muchos aliados en el sector energético español y la única salida de Iberdrola es participar en una nueva operación de concentración en el sector energético nacional a tres bandas: Iberdrola-Gas Natural-Unión Fenosa.

Esta posibilidad permitiríт­a crear un gran grupo energético nacional que pudiera hacer frente al futuro gigante E.On-Endesa. Sin embargo, un acuerdo de estas caracteríт­sticas se plantea como una difíт­cil solución, ante los diferentes personalismos que confluiríт­an en una operación de estas caracteríт­sticas.

Por una parte, el mencionado Ignacio S.Galán, empujado por la necesidad a una operación en la que deberíт­a de participar de igual a igual, después de varios años de renovación en Iberdrola hasta su total modernización. No hay que olvidar que la llegada de Galán se produce tras el fracaso de la fusión Endesa-Iberdrola. Por otro, el presidente de Gas Natural, Salvador Gabarró Serra, que intentaríт­a mantener una posición de liderazgo ante una nuevo movimiento empresarial de caracteríт­sticas similares. Y, por último, la figura de Florentino Pérez, presidente de ACS y principal accionista de Unión Fenosa, que evidentemente querrá hacer valer el importante desembolso realizado durante el pasado año para alcanzar una mayoríт­a en la eléctrica.

Como vemos, esta situación no parece agradar a ninguno de los posibles participantes en la operación. No obstante, esta integración se hace necesaria para los tres grupos si no quieren caer en manos de otro gigante europeo y, por tanto, jugar un papel secundario en el sector energético ya no sólo español, sino europeo.