{mosimage}Repasando la bibliografíт­a puramente bursátil nos hemos topado con un banquero singular llamado Lord Overstone, que murió hace muchos años. Este personaje dividió los movimientos de las Bolsas es una serie de pequeños ciclos. Decíт­a, que los mercados repetíт­an de manera inexorable comportamientos de antaño aunque siempre cambiaban los protagonistas, actores y partíт­cipes. Dividió, en fin, las tendencias bursátiles en 10 partes. Nosotros nos permitidos hoy una licencia, como en tantas otras ocasiones, y acotamos más los periodos. Lord Overstone decíт­a que primero llegaba a los mercados un periodo de tranquilidad seguido de otro de mejora y a continuación sendas fases de confianza, prosperidad, excitación y caíт­da para volver a la tranquilidad, mejora...

Con este planteamiento elaboramos hace unos díт­as una encuesta de situación en cíт­rculos muy concretos del mercado, los que conocíт­an la tesis de Lord Overstone. La primera sorpresa con la que nos encontramos es que la mayor parte de los encuestados cambia un término de los señalados, el de confianza y lo sustituyen por el de incertidumbre. Fácil colegir, por tanto, que los expertos apuestan por la continuidad del ciclo alcista actual, hasta que concluya con lo que se denomina fase de prosperidad.

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La Bolsa, siempre bajo la lectura de este supuesto y según el sentimiento de los mejores analistas, habríт­a pasado ya por los periodos de tranquilidad, mejora y confianza, que los avatares geopolíт­ticos han provocado su sustitución por el de incertidumbre, como hemos dicho. Es decir, que todos los actores en el mercado asumen que hay que aprender a convivir con las tensiones recurrentes a nivel geopolíт­tico y las volatilidades inherentes a este fenómeno.

El análisis, que no alcanza a nuestro entender la categoríт­a de método riguroso, aunque síт­ digno de ser tenido en cuenta, adquiere una relevancia especial en los últimos tiempos después de la llegada de los principales íт­ndices bursátiles del mundo a los niveles más altos de los últimos cinco años. Con esta perspectiva cabe asumir que el final del periodo está próximo, aunque aún puede extenderse en el tiempo (los más optimistas hablan de dos a tres años, con altibajos) toda vez que queda por cotizar el ciclo de prosperidad al que aludíт­a el banquero.

Cuando uno contempla el gráfico adjunto e interroga a los mejores analistas técnicos se queda entusiasmado con la apuesta que hacen algunos especialistas respecto a que el Ibex alcanzará sus máximos durante el verano. Eso síт­, advierten de fenómenos de volatilidad crecientes, con rangos de fluctuación iguales o superiores al 3%.

APUNTE: La Carta de hoy es un ejercicio de simulación, no exenta de altas dosis de fantasíт­a, es decir, como lo que sucede cada díт­a en la Bolsa.