Obvio, quizá simplemente lo considera como algo implícito, el potencial de caída del USD y la inestabilidad en los mercados de commodities. Es preciso que el resto del mundo contribuya con su demanda doméstica a la demanda mundial. Con esto se refiere a la zona EUR y Japón. También valorá la necesidad de mayor flexibilidad en los mercados de divisas en Asia. De forma paralela, que India, China y Brasil deben abrir sus mercados a los productos externos. Por último, también considera que USA ya trabaja en la solución del déficit corriente a través de la reducción del déficit público. Bien, no es algo nuevo.

¿Y los mercados? quizá es bueno ahora recordar los niveles importantes desoportes. En un contexto donde se teme el repunte de la inflación, pero también lamoderación del crecimiento (no me atrevo a ponerle nombre, aunque estoy seguro queotros sí lo harán), todos los mercados saldrán finalmente perjudicados.

La liquidez prima, aunque es evidente que con mercados a la baja la liquidez mundial se restringe. ¡Ya vendrán tiempos mejores! estos estarán precedidos con la confirmación de que el crecimiento mundial se modera (pero no se deprime) y con correcciones en los mercados de commodities que amortigüen el miedo a la inflación.

En la medida que los riesgos inflacionistas proceden de los costes externos que no por la inflación (a pesar de los recientes repuntes en USA), una moderación en los precios de las materias primas permitirá que las bolsas consoliden. Pero esto no será inmediato. Ahora debemos vigilar niveles de 11.100 en el Dow, como también 1.245 en el S&P.
 
José Luis Martínez Campuzano es Estratega de Citigroup en España