EMPEÑ‘ADOS HASTA LAS CEJAS, UN MAL EMPEÑ‘

Moisés Romero - Miercoles, 12 de Julio

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Los españoles se muestran cada vez más incapacitados para ahorrar, como lo acaba de confirmar el dato de caída del ahorro, debido a los ingentes niveles de endeudamiento acumulados. Los expertos advierten del fuerte impacto negativo que tendrá en la economía nacional el cambio de ciclo en los tipos de interés, porque ha sido el descenso continuado de éstos durante los últimos años el que ha estirado las hipotecas y llevada la burbuja inmobiliaria hasta cotas inimaginables. Los españoles se hipotecan, también, para comprar coches y enseres y para pasar unos días de vacaciones. El fenómeno, importado de Estados Unidos, es analizado con lupa por los expertos, porque sus efectos serán negativos para los mercados más pronto que tarde. Se trata de un fenómeno nuevo en la economía española.

La Bolsa queda, de este modo, cada vez más en manos de los grandes profesionales, de los fondos de inversión y de las instituciones. O dicho de otra manera, el peso de la inversión privada, inducida por un ahorro creciente de las familias, se reduce de manera notable, porque las familias ahorran menos y se hipotecan más. Se trata de un periodo nuevo en la historia de la economía española, por cuanto la tendencia secular ha sido la contraria, la de forzar la maquinaria del ahorro al máximo en prevención de tiempos peores.

El detonante de esta situación ha sido el proceso acelerado de caída de tipos de interés desarrollada en primera instancia por la Reserva Federal de Estados Unidos y seguida a continuación por el resto de los grandes bancos centrales del mundo. La orientación cambió allí el año pasado y se mantiene al alza en el actual. Europa ha seguido los pasos de manera timorata, pero acelerará el ritmo de subidas de tipos de interés en los próximos meses, según todos los pronósticos.

El ciudadano español, hipotecado hasta las cejas, empeñado en empeñarse para comprar inmuebles, coches y para consumir, sin más, mira ahora con miedo el futuro, porque conforme pasan los meses más se incrementan los pagos, más difícil es llegar a final de mes. El impacto en los mercados es claro. A la menor presencia de inversores privados en la renta variable, con la consiguiente aminoración de los flujos de dinero, se une el mayor riesgo que para las instituciones financieras  supone el endeudamiento récord. Los impagos, ahora en niveles mínimos, pronto crecerán y con ellos un mayor distanciamiento de los inversores de este tipo de valores bursátiles.

Por lo demás, hemos conocido que el crédito hipotecario gestionado por las entidades financieras españolas superó por primera vez los 800.000 millones de euros, al alcanzar en mayo 811.236 millones de euros, lo que supone un crecimiento interanual del 26,3%, según datos de la Asociación Hipotecaria Española (AHE). Sólo en mayo se firmaron préstamos hipotecarios para la adquisición de viviendas y otros fines por valor de 15.546 millones de euros, lo que representó un incremento del 2% en comparación con el mismo mes de 2005. En los cinco primeros meses del año, el saldo vivo de este tipo de créditos se elevó en 71.941 millones de euros, el 9,7% más que en el mismo periodo del año pasado, explicó la AHE.

Las cajas de ahorro gestionaron en mayo créditos hipotecarios por valor de 435.207 millones de euros, con un incrementointeranual del 36,7%, por delante de los bancos, que contaron un saldo de 293.742 millones de euros (+30,6%). Las cooperativas de crédito gestionaron hipotecas por valor de 48.219 millones (+42,6%), y los establecimientos financieros de crédito movieron 7.008 millones de euros (+10,6%).

 

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Moisés Romero

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