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BME BUSCA RECOMPONER SU ESTRUCTURA DESPUÉS DEL AJUSTE ACCIONARIAL AHORA QUE LA COMPETENCIA APRIETA

Redacción - Martes, 21 de Noviembre
bme_r Los primeros meses de su vida en Bolsa (qué decir del día de su estreno en el mercado) fueron confusos. BME desilusionó a una mayoría de noveles que esperaban que no se hiciera realidad aquello de en casa del herrero...En otros términos, que la Bolsa debería subir con fuerza porque para eso es la Bolsa. Este análisis endeble y vano ha sido, no obstante, común entre inversores, operadores, analistas, especuladores y actores en general.  Pasado el primer lance, los observadores hilan más fino y siguen la pista a la nueva reorganización del capital, que es la que dará contenido a la proyección de futuro. En los primeros días, miembros emblemáticos como el Banco Popular vendieron toda su participación en el holding; otros lo han hecho de manera parcial, como Santander y BBVA, que han vendido entre el 5% y el 7%. También los ha habido que han incrementado posiciones, principalmente los intermediarios más activos con clientela extranjera. BME trata ahora de recomponer su figura al ruido de los movimientos de concentración en el sector a nivel mundial, aunque este fenómeno conviene analizarlo con lupa en el caso de BME. Además, llega la competencia y eso supondrá menores ingresos. De ahí el batacazo de la semana pasada de las gestoras bursátiles europeas.

"Hay un antes y un después en el holding de Bolsas y Mercados Españoles, que es el que marca el estreno de su cotización en Bolsa. Aparte del varapalo inicial, inesperado por la mayoría, lo importante es que se ha producido un reajuste del capital, que aún continúa, porque miembros históricos de la Bolsa española, como el Banco Popular, han decidido hacer plusvalías y otros, caso de determinados antiguos de agentes de cambio y de Bolsa, han decidido realizar plusvalías de manera parcial", dice un operador de la Bolsa de Madrid.

"En este mismo proceso se ha observado un claro interés comprador por intermediarios, sociedades y agencias de valores y Bolsa, que operan mucho con inversores extranjeros. Se trata de sociedades que han aumentado ahora su posición en el holding. Podemos decir, una vez más, que los nacionales venden y los extranjeros compran. Ello obedece a la mayor sensibilidad que tienen los extranjeros respecto a los posibles movimientos de concentración del sector", continúa. 

"Ello, pese a que la valoración de BME se ha hecho de modo muy ajustado. El precio definitivo de la OPV de BME suponía ha dado al mercado español un PER de 25,38 veces, que se reduce a medida que la cotización ha caído. No obstante, los multiplicadores de sus homólogos europeos están más altos, porque superan las 30 veces. O sea, que en teoría hay recorrido potencial al alza", añade.

En este sentido, los mercados han tomado buena nota de lo que dijo el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Manuel Conthe, antes de salir a Bolsa BME, de que la propia CNMV le había pedido a BME que incluyeran en su folleto la carta de la Deutsche Börse. "Eso fue una sugerencia (...) no (son) especulaciones y ya el mercado es mayorcito y verá si Deutsche Börse realmente quería iniciar una negociación genuina o era una pura estratagema", explicó el presidente del supervisor español", concluye.

Más competencia 

Como se sabe, un grupo formado por los principales bancos de inversión a escala mundial crearán un nuevo sistema paneuropeo de comercio de acciones que competirá directamente con las bolsas europeas más importantes. Se trata de los bancos estadounidenses Citigroup, Morgan Stanley, Godman Sachs y Merrill Lynch, los suizos UBS y Credit Suisse y el alemán Deutsche Bank, que a través de este nuevo operador permitirán un comercio más rápido de las acciones a unas tarifas mucho menores que las que actualmente cobran los principales mercados europeos Euronext, London Stock Exchange y Deutsche Boerse. La noticia provocó fuertes retrocesos bursátiles de las gestoras en el tramo final de la semana pasada.

El Gobierno, vigilante

El Gobierno seguirá de cerca los pasos de los accionistas de BME en todo momento y máxime si proliferan las OPA. Economía está fijando las reglas del juego. Así se desprende del proyecto de Ley que el Tesoro ha sometido a consulta pública y que desarrolla las modificaciones hechas en abril a la ley del Mercado de Valores, modificaciones que, en la práctica, ya reforzaban el blindaje sobre las sociedades de compensación o liquidación o rectoras de mercados.

El proyecto habilita al ministerio de Economía para bloquear tomas de participación significativa en BME, entendiendo como tales participaciones del 1%, 5%, 10%, 15%, 20%, 25%, 30%, 33%, 40%, 50%, 66% y 75%. En cualquiera de esos umbrales es posible el veto, a propuesta de la CNMV, 'cuando estime que puede comprometer el buen funcionamiento de los mercados en cuestión, distorsionar su desenvolvimiento o no darse un trato equivalente a las entidades españolas en el país de origen del adquirente', algo que ya figuraba en la modificación de la Ley del Mercado de Valores.

Ahora Economía añade que tendrá en cuenta 'muy especialmente' la influencia que pueda ejercer sobre el mercado dicho del accionista. Y se valorarán factores como las participaciones del accionista en otros mercados de valores o en los órganos de gestión de éstos.

BME reconoció en su folleto de la OPV que Deutsche Börse les manifestó su interés en entablar un diálogo para explorar posibles vías para combinar sus respectivos negocios. No obstante, Zoido ha reiterado que "BME no ha mantenido ni mantiene en la actualidad negociaciones con ningún operador de mercados o sistemas de cara a posibles alianzas o acuerdos de integración".

 





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