La Carta de la Bolsa La Carta de la Bolsa

EL PERIODO 2007 - 2018. LA CRISIS DEL 2010 (9)

Santiago Niño Becerra - Jueves, 15 de Marzo ilustraciónEn Asia, la extraordinaria adaptabilidad de Japón y de su modelo y la expansión internacional que su economíт­a habíт­a desarrollado en las décadas anteriores, le ayudó a sobrellevar con una cierta holgura los efectos de la crisis; además, la cultura económica japonesa basada en el acuerdo, en el equipo y en la coordinación de actividades, contribuyó decididamente a ello. Por añadidura, cuando, a partir del 2015, las "nuevas ideas' se convierten en una de los motores de avance para salir de la depresión, la creatividad japonesa contribuyó, decididamente, a la recuperación de su economíт­a y de su sociedad. No fue éste el caso de China.

La economíт­a china, en gran medida sustentada por la inversión extranjera y por la exportación de bienes de bajo valor añadido fabricados de resultas de la deslocalización de actividades desde paíт­ses con costes de producción más elevados, se colapsó, en ello mucho tuvo que ver la particular forma china de hacer las cosas basada en la negociación, en el tacto, en la espera, en el formalismo y en métodos de gestión indirecta (Ver Anexo C). Cuando se produjo el inicio de la crisis, el modo de hacer chino entró en conflicto con las necesidades del momento; la inercia de su historia y su demografíт­a imposibilitaron el cambio de rumbo de su economíт­a. Al llegar el 2015, la economíт­a y la sociedad china habíт­an perdido prácticamente todo lo ganado en el períт­odo 1980 - 2005.

Africa, la práctica totalidad de Latinoamérica (el Area del Caribe inclusive) y extensas zonas de Asia entraron en una fase de desintegración debido al colapso de sus débiles estructuras administrativas y de gobierno y a la tremenda mortandad causada -sobre todo en Africa- por el Síт­ndrome de Inmunodeficiencia Adquirida, la Malaria y el virus Ebola (Ver Anexo E), asíт­ como por la falta de alimentos derivada de la finalización de la ayuda internacional y de sus carencias infaestructurales. De hecho, América Latina y Africa quedaron reducidas a reservorios de materias primas explotados por diversos consorcios de corporaciones en régimen de asentamiento a través de sistemas robotizados altamente eficientes y muy escasamente utilizadores de factor trabajo.

(Finaliza mañana)

@sninobecerra

Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.




[Volver]