La Carta de la Bolsa La Carta de la Bolsa

El miedo siempre está presente. Por eso, “Todas las caídas pasadas parecen una oportunidad, todas las caídas futuras parecen un riesgo”

Jaime Andrade - Viernes, 02 de Febrero

Una magnífica reflexión:"Todas las caídas pasadas parecen una oportunidad, todas las caídas futuras parecen un riesgo”.-Morgan Housel. "Nada demasiado bueno o demasiado malo permanece así para siempre, porque los buenos tiempos plantan las semillas de su propia destrucción a través de la complacencia y el apalancamiento, y los malos tiempos plantan las semillas de su propio cambio a través de la oportunidad y la resolución de problemas impulsada por el pánico".-Morgan Housel. “¿Cómo es posible que la gente inteligente se equivoque tan a menudo? No hacen lo que te estoy diciendo que hagas: usa una lista de verificación para asegurarte de obtener todos los modelos principales y usarlos juntos de una manera multimodular”.-Charlie Munger

Los sentimientos, el miedo, la codicia, y otros fenómenos más causan estragos en los inversores más impacientes y desorientados. Miedo para comprar cuando los precios han caído y avaricia cuando ya hay que vender.

Las economías y los mercados financieros experimentan períodos de crecimiento y contracción a lo largo del tiempo. Hay varias teorías que intentan explicar los ciclos económicos y financieros, pero la más común es la que se refiere a la teoría del ciclo económico de Kondratiev.

Los ciclos económicos de Kondratiev se fundamentan en que las economías experimentan períodos de crecimiento y contracción que duran aproximadamente 50 años. Estos ciclos se dividen en cuatro fases: la fase de expansión, la fase de auge, la fase de contracción y la fase de depresión.

En la fase de expansión, la economía experimenta un crecimiento acelerado impulsado por una serie de innovaciones y cambios tecnológicos que permiten una mayor producción y eficiencia. En este periodo, el empleo y la inversión también aumentan.

El periodo de auge es cuando la economía alcanza su punto máximo, y la inflación comienza a aumentar debido a la alta demanda y los precios crecientes. En esta fase, el empleo y la inversión siguen aumentando, pero a un ritmo cada vez más lento.

Cuando llega la contracción, la economía comienza a desacelerarse, y la inflación disminuye. Durante esta fase, el empleo y la inversión flojean y la economía entra en una recesión.

En este encuadre, puede llegar la depresión, que es cuando la economía sufre una caída significativa, y el desempleo y la disminución de la inversión son generalizados. La economía eventualmente se recupera y el ciclo comienza de nuevo con una nueva fase de expansión.

Los inversores y las empresas deben estar conscientes de estos ciclos y ajustar sus estrategias de inversión y planificación financiera en consecuencia. Pero, con harta frecuencia, no lo están.

Ciclos económicos, financieros y bursátiles, de ida y vuelta. Lo importante es aguantar. No hay mal que cien años dure.




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