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“Es sencillo utilizar información privilegiada en España”

Redacción - Sabado, 11 de Junio El presidente de la Comisión Nacional de Mercado de Valores (CNMV), Julio Segura, considera que "es relativamente sencillo utilizar información privilegiada, pero no en España, sino en todo el mundo", y lamenta la existencia de un sistema legal "muy garantista" que hace que sea "muy difícil" llegar a una sanción. En una entrevista publicada por la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), Segura afirma que, a pesar de que la información privilegiada es un tema regulado "con mucha precisión", las dificultades empiezan cuando se opera indirectamente a través de medios interpuestos. "Por tanto, es relativamente sencillo utilizar información privilegiada, pero no en España sino en todo el mundo, si se tiene cuidado de no dejar rastros o de que los rastros no sean muy directos", señala. Así, Segura subraya que el organismo que preside espera que la Ley de Economía Sostenible solucione el problema de las herramientas de las que dispone la CNMV para combatir los casos de información privilegiada. "Perseguimos solo tener los mismos medios de inspección que tiene la Comisión de Defensa de la Competencia, no superiores, ni tener hombres de Harrelson ni nada parecido. Pero es que en las condiciones actuales, salvo en los casos de autoinculpados o del acta del Comité de Inversiones, no podemos sancionar a casi nadie", dice. La CNMV supervisa no solo los mercados financieros y sus operaciones, sino todas las empresas de servicios de inversión, las sociedades gestoras y las sociedades cotizadas, lo que asciende a "en torno a 8.000 agentes que supervisar", indica Segura, que considera que cuando se habla de supervisión de mercados, "de lo que se habla esencialmente es de información privilegiada y de manipulación de mercado". Además, Segura indica que el organismo que preside tiene un sistema de alarmas que analiza todas las operaciones y hacen saltar las alarmas 70.000 operaciones al año, un sistema, en su opinión, igual "demasiado sensible", ya que al final se terminan investigando 15.000. De todas maneras, lamenta la combinación de unos instrumentos de inspección "poco poderosos" junto con un sistema legal "muy garantista", que hace que sea "muy difícil" desarrollar casos que conduzcan a una sanción.


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