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España 2.1

Santiago Niño Becerra - Viernes, 12 de Septiembre (Hace unos meses hablamos de una ¿nueva? España que ahora se está manifestando, de ahíт­ lo de aquel tíт­tulo: "España 2.0", pero están saliendo más cosas -y saldrán más, muchas más-, por lo que hay que hablar de una modificación de esa nueva España, de ahíт­, como era usual en informática (ya, casi no: ahora cambian el nombre al programa), lo de 2.1).

Recordarán que lo hemos dicho ya varias veces: la economíт­a española va a ser una de las que más va a sufrir con la crisis que ya está llegando, de hecho, en la precrisis ya va a estar entre las que más van a sufrir. También hemos dicho el motivo: el grado de dependencia de la economíт­a española es mucho más elevado que el de otras economíт­as, por lo que !

Es muy curioso leer en la prensa, incluso en la económica, y cosas como que “la culpa de la situación que se está dando en España la tiene la falta de crédito financiero” o que “la situación inmobiliaria que se ha estado dando en los últimos años ha dado lugar a una situación ficticia”.

Sorprende porque esa misma prensa, prácticamente toda la prensa económica y no, escrita o audiovisual, durante años no hizo otra cosa que cantar loas al maravilloso crecimiento español, a lo bien que lo estaban haciendo los gobiernos de turno, a todo lo que estaba aumentando la riqueza de las españolas y de los españoles, y a lo bien que iba todo; ¡por favor, si hace cinco años ya se veíт­a en que iba a desembocar todo esto!.

Ejemplos, n-mil, Colonial vale. Hay que quitarse el sombrero por el valor que ha demostrado la empresa al anotar de forma voluntaria en sus libros una minusvalíт­a en el valor de sus posesiones de casi el 20%: una quinta parte: de cada cinco euros, uno. Dejando al margen los motivos que le han llevado a hacerlo y de si, dentro de unos meses, esa minusvalíт­a deberá ser aún mayor (tendrá que serlo: a díт­a de la fecha el volumen de sus deudas supera el 85% del valor de sus activos, y estos van a continuar bajando, para Colonial y para todos); la pregunta, simple, fácil, sencilla, es: ¿por qué se ha llegado a esta situación?.

Parto de la base de que los managers de las compañíт­as españolas no son unos zotes ignorantes, entonces, ¿qué sucedió?, ¿de qué forma se ha podido llegar a estar al borde del abismo? (Recordarán el chiste: “Españoles. Hace veinte años estábamos al borde del abismo, hoy hemos dado un gran paso hacia delante”). Atentas/os porque lo que sigue es material sensible.

Un problema -muy grave- con el que nacen todas las organizaciones, todas las compañíт­as, todos los sistemas, es el hecho de que ya llevan la muerte escrita en su rostro. Al principio de los años 90, y, sobre todo, en el 2003, la economíт­a mundial y, evidentemente, la española, habíт­a alcanzado ese punto de no retorno. ¿Cómo se reaccionó?, pues huyendo hacia delante.

El sistema comenzó a dar crédito a mansalva permitiendo que las tasas de endeudamiento alcanzaran niveles absurdos e ilógicos; a la vez, permitió que los activos -todos- multiplicasen su valor hasta alcanzar cotas fuera de todo tino; y, para acabar, toleró cualquier práctica financiera, cualquiera.

Todo creció, todo: el PIB, el empleo, el consumo, el crédito, las cotizaciones, ! Cualquier persona con dos dedos de frente podíт­a ver que no era sostenible que una persona tuviese que dedicar el 55% de lo que ingresaba a pagar sus deudas, cualquiera. La pregunta, obviamente, es, ¿por qué se ha estado permitiendo?.

Pienso que todo esto que se ha estado haciendo aquíт­ y allá, pero aquíт­ más, en términos relativos, ha sido porque ya no quedaban más cartuchos, porque el modo de hacer ya estaba agotado, porque, o se hacíт­a lo que se hizo, o habíт­a que empezar a cambiar cosas, y, para eso, aún no habíт­a llegado el momento, lo que sucede es que eso que se hizo va a tener unas consecuencias tremebundas.

Habrá quien diga que no, pero yo siempre he creíт­do que es mejor ir preparando las cosas que esperar, sin hacer nada, a que lleguen, actuando como si todo fuese maravilloso. España va a sufrir más que otros porque ha hecho más cosas “feas” que otros debido a que precisaba hacer más cosas feas, debido a que su economíт­a era más débil, más pobre, más limitada, más dependiente. En fin, es lo que hay.

Cambio de tema, pero no. Hace unos díт­as me llegó un rumor que les traslado; insisto: un rumor, ni quito ni pongo. Cuentan, dicen, aseguran, que la cantidad total de pasta española fugada al exterior asciende a 45.000 millones de euros. Pues bien, se dice que se está preparando una amnistíт­a. Quienes traigan su pasta, se les aplicará, tan sólo, el marginal del IRPF y todo el pasado y el presente quedará bendecido, puro, limpio. Es decir, el Estado ingresaríт­a sobre 20.000 millones, y, se supone, a las cámaras acorazadas de las entidades financieras iríт­an a parar otros 20.000, con lo que esas entidades tendríт­an pasta fresca. Quedaríт­a una cosa pendiente: convencer al pueblo que algo asíт­ es necesario, pero, bueno, para eso están los expertos, ¿no?.

(El Lunes seguimos con esto).

Santiago Niño Becerra. Catedrático de Estructura Económica. Facultad de Economíт­a IQS. Universidad Ramon Llull.

@sninobecerra

Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.




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