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La crisis que ya está aquí (2тª Parte)

Santiago Niño Becerra - Lunes, 24 de Mayo Nos hablan del déficit pero lo que están queriendo decir es deuda; la deuda total, la deuda completa, la deuda levantada sobre deuda, la deuda que realimenta a la deuda.ilustración

¿Alguna duda había de que “estos maravillosos años” habían estado basados en la deuda?: era imprescindible reducir el déficit para indicar que se iba a pagar a quienes se debía, pero ahora se ve, ¡ahora!, que las medidas para reducir el déficit reducen el crecimiento, lo que disminuye los ingresos para pagar a esos a quienes se debe. Ya, ya: no nos fiamos de Grecia, o de España, pero si de USA ... de momento.

“Los PIIGS ya no son útiles ni necesarios para hacer negocio, y estorban, y distraen recursos, pero USA crea los dólares y, de momento, son necesarios, y útiles, y nos fiamos; mañana, cuando se manifieste el agotamiento en USA, cuando su deuda se haya disparado y la confianza en su capacidad de pago decline, ya veremos”. ¿Qué veremos?. Veremos como la crisis, oficialmente, ya había llegado.

No hay nada que hacer porque nada se puede hacer con el viejo manual: el actual. En las economías desarrolladas, de media, la deuda pública ascendía al 73% del PIB en el 2007, cuando se creía, se pensaba, se asumía, que “el mundo iba bien”, en el 2015 se estima que llegará al 110%, en el 2015: en el momento en el que, pienso, estaremos empezando a salir del estancamiento que seguirá al hundimiento tras el crash; en ese momento, en el 2015, el déficit será, en esas economías del 4,7% del PIB. Pues bien, para llegar a una deuda pública del 60% del PIB en el 2030, ¡en el 2030!, cuando ya llevemos unos diez años de recuperación, el superavit en el 2020 debería ser del 3,8%.

¿Es posible, estando a las puertas de una crisis sistémica, diseñar una estrategia para reducir el déficit actual al 4,7% en el 2015 y para llegar a un superávit del 3,8% en el 2020 justo cuando se empiece a salir de las cenizas de la crisis y del estancamiento posterior?, pienso que si, pero utilizando otro manual, otras reglas, otras normas de las que nadie habla aún.

La crisis ya está aquí: en la UEM se está produciendo el esbozo de una nueva operativa: se crea un fondo de estabilización porque el sistema ya no es estable ni logra llegar, automáticamente, a la estabilidad, y el regulador de la política monetaria va a pasar a comprar deudas (en plural) para inyectar una liquidez que se atesora a fin de tapar agujeros: todo acaba siendo lo mismo: la deuda.

Fue una estabilidad ficticia: “crédito Ѣ€” consumo-de-todo Ѣ€” deuda”: fue; hubo liquidez forzada, inventada, a base de productos imposibles pero ciertos: hubo; pero de aquello ya no queda nada, y hoy tan sólo resta esperar, aguardar, como aquel gentleman paladeando un martini en la cubierta del Titanic mientras se hundía en el Atlántico.

Se diseñó un ente imposible -la UEM-, en un entorno insostenible -USA en el centro de un mercado de dólares-, dotado de un mecanismo no-posible -te presto / consumes / me debes-, en una melange no-sostenible -todos-con-todos-y-a-la-vez-. Hasta que se ha caído: porque ni se aguantaba ni era, ya, aguantable. Crecer sobre nada es posible mientras el peso de lo que se levanta no exceda la resistencia de la base sobre la que se asienta: no, no es mágico: sólo lo parece: se ha estado haciendo. Se creció, mucho, mucho, pero el suelo -la deuda- ha acabado cediendo.

Ahora ya está tocando otra cosa, otra cosa que ni puede ser más de lo mismo porque eso ha llevado a lo que ahora es, ni puede ser el simple recorte sin cambiar ninguna regla porque eso colapsa el modo como hasta ahora hemos estado creciendo. Ahora hay que diseñar, hay que poner en marcha otro manual, y eso, como decíamos, es otra cosa.

Mientras eso llega hay que convencer de que se podrá continuar pagando los intereses, de ahí los planes de ajuste; ¿el principal?, un respaldo para sostener los balances de las entidades financieras, respaldo sostenido con las contribuciones fiscales pagadas por europeos y estadounidenses hoy y mañana por todo el mundo, un apunte en el agua. ¿“Francia Ѣ€” España Ѣ€” Túnez Ѣ€” Guatemala”?, ¿por qué no?.

Más: Me impresionó, mucho, mucho: no recuerdo haber visto juntos ambos conceptos “Senate Passes Reforms Designed to Prevent Worst U.S. Collapse Since 1930s”: “The U.S. Senate, bringing congress to the brink of passing the most comprehensive regulation of the financial industry since the Great Depression (...)”. http://www.bloomberg.com/apps/news?pid=20601087&sid=a3riG_0r9O4k&pos=1

(La deuda. Fíjense en The UK (porcentajes de la deuda pública sobre PIB): 2008: 35%, 2009: 68%, 2010: 81% (prev.), 2014/2015: 75%, 2031/2032: 40%. Para llegar a esa tasa en el 2014/2015, los gastos deberán descender 67 mM pouds entre el 2011 y el 2014. ¡Demasiao!. ¡Y es una de las economías que, pienso, tiene más futuro!; evidentemente no será yendo por el camino que ahora va).

(Se preguntarán -me lo preguntan- que va a suceder con las economías emergentes, con los países subdesarrollados; Uds. mismas/os: si dependen de que otros bla, bla, bla, y de quienes dependen no van a poder, ya me dirán).

(¿La intervención de Cajasur?, lógico: el poli malo será el Banco de España, pero entonces, ¿quién es el poli bueno?. Yo me he quedado con un porcentaje: 10,5%: lo que representaba el agujero sobre los activos. ¿Sienta jurisprudencia ese porcentaje?. Y el del fondo preguntando lo políticamente incorrecto: “Y esos activos, ¿están contabilizados a su valor real?”).

Santiago Niño Becerra. Catedrático de Estructura Económica. Facultad de Economía IQS. Universidad Ramon Llull.

@sninobecerra

Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.




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