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Las pensiones en España – y 2

Santiago Niño Becerra - Martes, 15 de Julio

¿Qué conclusiones se sacan de las cifras anteriores? Aunque las cotizaciones sociales han crecido 13.475 millones desde 2005 al 2012, y que las aportaciones del Estado en las mismas fechas han crecido en 4.308 millones de euros, ambas cifras (17.783 millones) no compensan el incremento del gasto en pensiones, que ha sido de 34.547 millones de euros.

El Fondo de Reserva, el primer paso se dio en el año 1995, bajo el paraguas del pacto de Toledo, en esas reuniones se buscaba:

* Separación y clarificación de las fuentes de financiación de la Seguridad Social, el Estado debe pagar prestaciones como las pensiones no contributivas y complementos mínimos de pensión y la protección familiar, entre otras. Hasta el año 2014 el Estado no ha aportado totalmente, sus obligaciones.

* La creación de fondos de estabilización y reserva para atender necesidades futuras en materia de de prestaciones no contributivas, originadas por desfases entre ingresos y gastos en la Seg. Social, buscando atenuar los ciclos económicos. Se  crea en el Ley 24/1997, de consolidación y racionalización de la Seg. Social. Posteriormente la Ley 28/2003 le volvió a dar mayor cobertura. La primera dotación se realizó en el año 2000, y se ha realizado las siguientes aportaciones y acumulaciones:

Año 2000: 600 millones. Acumulado de 601 millones

Año 2001: 1.803 millones. Acumulado: 2.433 millones

Año 2002: 3.575 millones. Acumulado: 6.168 millones.

Año 2003: 5.494 millones. Acumulado: 12.024 millones.

Año 2004: 6.700 millones. Acumulado: 19.330 millones.

Año 2005: 7.000 millones. Acumulado: 27.184 millones.

Año 2006:7.500 millones. Acumulado: 35.879 millones.

Año 2007: 8.300 millones. Acumulado: 41.150 millones.

Año 2008: 9.400 millones. Acumulado: 50.670 millones.

Año 2009: 377 millones. Acumulado: 60.002 millones.

Año 2010: 1.740 millones. Acumulado 64.375 millones

Año 2011: 0. Acumulado: 64.815 millones

Año 2012: 0. Acumulado: 63.008 millones.

Año 2013: 0 Acumulado: 53.744 millones.

 

- Los rendimientos acumulados desde 2000 al 2012 han sido de 17.003 millones de euros. En la actualidad el Fondo de Reserva está invertido casi en su totalidad en Deuda Pública española.

- Las retiradas del Fondo han sido de 23.631 millones, de los que 18.61 millones provienen del Fondo de Reserva y 4.980 millones del Fondo de Rehabilitación de la Mutuas.

- En el 2012 se retiró 7.000 millones del Fondo de Reserva y otros 4.980 millones del Fondo de Rehabilitación, que este último era una pequeña hucha que habían generado las Mutuas Patronales. En los años 2012 y 2013 las Mutuas Patronales han transferidos sus excedentes al Fondo de Reserva, que en el 2013 alcanzó los 1.092 millones de euros.

- En el año 2013 se ha dispuesto se ha dispuesto de 11.648 millones de euros, por lo que a este ritmo las reservas duran entre 4 o 5 años.  En el 2013, el Estado inyectó 27.000 millones de euros a la Seguridad Social, de los 15.000 fura para el Servicio Público de Empleo, y los otros 12.000 millones a los complementos mínimos de pensión y otras prestaciones no contributivas.

- En junio de 2014 se ha tenido que utilizar cerca de 6.000 millones del fondo de reserva, para así pagar la extra de junio a los pensionistas.- El déficit de la Seguridad Social ha pasado de un superávit del 0,8% del PIB en el 2009, a un déficit del 1,16% de PIB en el 2013.

- Los ingresos se agravan, ya que los rendimientos de la Deuda Pública española son cada vez más pequeños, consecuencia de la bajada de la prima de riesgo.

- Otro problema que los 53.744 millones del Fondo de Reserva que hay a 31 de diciembre de 2013  están invertidos, casi en su totalidad, en Deuda Pública española, y como tal no computan a efectos de % sobre el PIB, en el importe total del déficit.

- Cada subida de un 1% de la pensiones son 1.035 millones, que se acumulan en años sucesivos, que es alrededor de un 1% del PIB.

 

Y, ¿qué se puede hacer?. El Estado no puede financiar con más aportaciones, una salida es que las pensiones de viudedad se financien con impuestos, y como consecuencia aquel viudo/a que tengan otros ingresos no se la pagaran.

Es inviable subir, tanto la cuota patronal como la obrera, aunque para el año 2014 se subirán las bases de cotización máximas, un 5%.

Por lo tanto, el problema de la pensiones no es coyuntural (consecuencia de la crisis) es ya estructural, que se agravará con que a partir de ahora los salarios son más bajos, y hay períodos de carencia en la vida laboral de las personas y encima entran más tarde al mercado laboral, esto último será bueno para las pensiones de dentro de 30 años.

Otro gran problema añadido, es el demográfico, en los próximos 18 años (2020) la cohorte entre 25 a 39 años cae en 650.000 efectivos, y aumentarán la cohorte de entre 50 y 65 años en 1,25 millones de personas.

 

En resumen, si cada vez se entra más tarde al trabajo, se quiere uno jubilar antes, y se vive muchos años más, el coctel es explosivo, y se hace insostenible. No se resuelve ni con más niños, ni con más inmigrantes, ni con más productividad, ni con más crecimiento del PIB. El problema se resuelve con un ciclo activo más largo, rebaja de las expectativas durante el ciclo pasivo, y un mayor esfuerzo individual de los trabajadores, es decir, una mezcla de las tres.

Las personas mayores en 2013, eran de 8.333.283 personas (57% mujeres y 42,8% hombres), de los que un 30,8% tienen más de 80 años, y más de 100 años un 0,14%.

A mediados de este siglo, habrá 15,2 millones de personas mayores, de los 65 y + serán 6,6 millones, y 80 y + subirán a los 6,5 millones.

La esperanza de vida a los 65 años es 20,27 años en el 2014, y pasará a los 23,52 años en el 2030, y los 23,8 años en el 2040.

Como punto final, consecuencia de la crisis y de la incertidumbre de la futura reforma de la Seguridad Social, según datos recientemente aparecidos en la prensa, se están jubilando 10.000 trabajadores al mes, sin haber cumplido los 65 años. La jubilación anticipada (de 61 a 64 años), a la que se aplica un coeficiente reductor, y se regula por la legislación anterior, el único requisito es en causas no imputables al trabajador el tener 33 años de cotización, y a voluntad del interesado tener 35 años de cotización efectiva. En casi todos los casos con pensiones altas, en comparación con las futuras reformas, hay ciertos pensionistas, que se están jubilando, que hay una igualdad de importes entre su último salario y la pensión que cobra”.   

Impresionante, ¿verdad?. Porque siempre respondo respondí al remitente:

Mi respuesta fue:

“Muy gráfico, clarísimo y perfectamente resumido. Se lee en dos minutos, y se entiende todo

En los considerandos yo añadiría tres: 1) los salarios medios tienden a la baja, por lo que la cotización media bajará, y 2) el empleo a tiempo parcial y temporal va a más, por lo que el trabajador medio cotizará menos, y 3) el desempleo estructural tiende al alza, por lo que la cotización total descenderá.

Y, un comentario: pienso que la esperanza de vida tanto al nacer como tras la jubilación, tienden a la baja: a medida que el acceso a la sanidad se encarezca y dificulte a la vez que la persona media se alimente peor por la caída de la renta media, el número de años de vida caerá: en Rusia sucedió eso tras la desaparición de la URSS.

Insisto. Está muy bien”.

 

Sugerencia. Ahora vayan a la sección ‘Archivo’, accedan a mi texto de ayer, y lean las dos partes de nuevo.

@sninobecerra

Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.




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