La Carta de la Bolsa La Carta de la Bolsa

Tortugueando: ¿De la euforia a la ansiedad y de la ansiedad a la decepción?

Germán Fermo - Lunes, 14 de Marzo

Definición de tortugueadordícese de aquella persona o nación, que camina al ritmo de una tortuga. La palabra ajuste genera mucha irritación. A aquellos que están irritados, les comento que lamentablemente la administración anterior tuvo una oportunidad única para ahorrar y generar superávit fiscal. En ese contexto, el Banco Central tendría muchas reservas y no habría déficit y podríamos distribuir la riqueza generada, especialmente entre los que mas lo necesitan, criterio que avalo ampliamente. Lamentablemente, nada de esto ha ocurrido, a pesar de haber tenido años extraordinariamente favorables para commodities, circunstancia que nos hubiese permitido ahorrar sustancialmente, tenemos hoy en día un Banco Central con reservas exhaustas y un formidable déficit fiscal, principal causa de la inflación que padecemos. 

La responsabilidad del ajuste no es de quien corrige, sino de quien dilapidó en primera instancia. Ojo, también avalo un ajuste sesgado a quienes más tienen. Los que se oponen al ajuste reclamen entonces a la administración anterior y si tenemos suerte de que devuelvan lo que lamentablemente no está, podremos ver a un Central con muchas reservas y a un fisco con mucho superávit y nos ahorramos el ajuste. Pero si eso no curre, encauzar a la Argentina hacia un nuevo sendero de crecimiento necesariamente requiere corrección o sea, ajuste, gradual o acelerado, pero ajuste al fin de cuentas. No existen soluciones gratis en economía y si no se ajusta, la contrapartida será el endeudamiento. Argentina ha sido arrasada en la última déKada. Una sociedad que gastó de más, en algún momento deberá gastar de menos. Una sociedad que por una déKada convalidó con su voto cómplice e ingenuo un despilfarro fiscal de dimensiones bíblicas, deberá ahora hacerse cargo. Bienvenidos a una realidad muy cruel, la administración anterior dejó a la Argentina en un rojo muy grande, para corregirlo deberemos todos sacrificarnos. Es una lástima que el gobierno actual no lo diga así de claro. Los dejo con una nota que publiqué tiempo atrás basada en el concepto de inclusión social vía educación que sintetiza el país al que desearía converger obvio, dicho país es imposible sin sacrificio: “La Argentina del Choripán Merece un Sueño Utópico”.

Twiteaba:

“Es muy posible la inclusión social vía educación, mi nota: “La Argentina del Choripán Merece un Sueño Utópico”

“Me cuesta creer que a la sociedad argentina le cueste creer, el formidable despilfarro fiscal al que estuvo sometida en la última déKada”

Bien por el BCRA que, dada las restricciones con la que comenzó y algunos volantazos, está aspirando todo lo que puede, no hay mucho más que se pueda esperar del BCRA en el corto plazo, veremos después cómo desarman el mega-stock de Lebacs que se está generando. Pero a Hacienda¿no le falta un cambio más? La delineación de un plan económico claro y contundente le corresponde aHaciendaHacienda debería revertir el ciclo de caras a las legislativas del 2017, ¿a esta velocidad llegan?

Cuatro años pasan muy rápido, es más, no hay cuatro años, las legislativas son en 2017. Pongan quinta y aceleremos a fondo de una vez. No quiero que nuevamente la tortuga nos gane en el pique corto. El gradualismo tiene beneficios que podemos resumir en reducción de costos sociales y políticos en el corto plazo. Pero también el gradualismo tiene costos: si los cambios estructurales vienen en cámara lenta, pues bien, la economía real reaccionará en cámara lenta, valga la redundancia. Obvio, la brecha de corto plazo entre la poca aceleración en cambios estructurales y la mucha aceleración que se pretende en la economía real la cubriría la deuda nacional y provincial, con un potencial plan de infraestructura BIEN KEYNESIANO que en teoría generaría sustancial crecimiento y dicho crecimiento implicaría tres efectos positivos contundentes: a) se licuaría el déficit que no se quiere reducir en valor absoluto, b) se generaría además, la capacidad de repago de la deuda que se emita para generarlo, c) y por ahí también, podemos irnos todos a Disney de vacaciones. Quizá sea el primero en instaurar este concepto pero a esta estrategia me animo a denominarla: KEYNESIANISMO APALANCADO o sea, obra pública en escala financiada con endeudamiento externo, fingers crossed.

El gobierno se acerca a sus primeros cien días de gestión, sin dudas los más importantes para tomar decisiones de fondo, bien estructurales y re-formativas de la economía argentina. Se han tomado tres decisiones sustanciales. Primero, la liberación parcial del cepo (dado que no estamos todavía ante un esquema de libertad absoluta en la cuenta capital), implicó arrancar en la dirección correcta. Con errores e improvisaciones y con claras violaciones contractuales, se decidió prematuramente liberar y la liberación per se es una excelente noticia, aun cuando critico el timing y la formaSegundo, se procedió a un fuerte ajuste de tarifas, bien ahí. Tercero, estamos muy cerca de dejar al default detrás, lo cual es excelente y probablemente el Presidente Macri sea muy recordado por esta decisión que debió haberse tomado años atrás. Con lo cual, estos cien días se resumen en tres medidas que conceptualmente son correctas y contundentes, formas aparte.

En cualquier país normal, estas tres medidas serían más que suficientes para re-encauzar a una economía hacia un sendero de crecimiento estable. Pero el problema es que Argentina no es una economía normal, la déKada perdida la infectó en tantas dimensiones que tres cambios, aun cuando hayan sido así de contundentes, son poco y con esto no quiero minimizar la magnitud y relevancia de las tres medidas que describí en el párrafo anterior. La herencia del despilfarro fiscal y bíblica distorsión económica en la que se ha dejado a la economía argentina debería indicarle al equipo económico que todo lo hecho es sumamente insuficiente para alcanzar el objetivo final: crecimiento y además que los argentinos pendulares compren este nuevo modelo así lo vuelven a votar en las legislativas del 2017. El Presidente Macri está a años luz de conseguir dicho objetivo y debería enfrentar a las legislativas con el ciclo invertido o sea, economía argentina en franco proceso de crecimiento.

Ansiedad, un nivel debajo de la euforia. Desde la euforia con la que se inició este nuevo ciclo político y económico estamos actualmente ya en una situación de ansiedad que se puede resumir en dos dimensiones. Primero, el dólar que comenzó muy tranquilo con la liberación del cepo obviamente porque todo el país estaba de vacaciones, ya a fines de febrero y comienzos de marzo obligó al Central a intervenir en el mercado de cambios y se animó a marcar 16 con pérdida de reservas incluso, que dicha intervención generó. Segundo, las tasas en pesos en la parte corta de la curva de LEBACS que comenzaron en 38% con la liberación del cepo, se relajaron erróneamente hacia el 32% y hoy vuelven a picar en punta al 38%, describiendo a un mercado que le dice al Central: si no me das tasas bien de punta, te voy a poner al rojo vivo el spot del dólar y te voy a sacar todas las reservas que me quieras dar. Tercero, que la Provincia de Buenos Aires haya emitido deuda al 2024 con una yield sobre el 9% también indica a un mercado internacional al que no le basta sólo la confianza y los globos amarillos. Emitir deuda por sobre el 9% es carísimo y describe a un mercado internacional que espera que haya un plan fiscal en breve tanto provincial como nacional, hasta tanto no aparezca dicho plan no se dará la tan ansiada compresión de spreads y sin compresión de spreads toda estrategia de deuda es insostenible. Más aún y OJO CON ÉSTA, con corporativos brasileños de altísima calidad quasi-soberanos cotizando fácilmente por sobre el 10%¿Querés Brasil quasi-soberana al 10%, Argentina Provincial al 9% o Argentina Nacional al 7.5%?

Decepción, dos niveles debajo de la euforia. Ojalá lleguen muy rápido los puentes keynesianos y rutas financiadas con deuda para darle a la economía argentina ese gamma (aceleración) que el equipo económico no pudo conseguir en estos casi cien primeros días de gobierno. Pero el Presidente Macri debería estar muy consciente de que si este GRADUALISMO KEYNESIANO APALANCADO  no empieza en breve a generar retornos, el gobierno arriesga una mutación en el estado de ánimo de una nación que es sumamente bipolar. De a poco, la ansiedad representada por la inexistencia de un pan económico integral que nos indique hacia dónde vamos podría mutar hacia un nuevo escenario:¿decepción otra vez? ¿La lluvia y el calefón?

Lamentablemente, la administración anterior puso a este gobierno en una situación muy incómoda: este es un partido para ganar 5 a 0 o perderlo 10 a 0, sin embargo, el equipo económico parecería haber decidido jugar al empate. Esta economía necesita un SHOCK urgente, pónganle el nombre que quieran y al no hacerlo el gobierno arriesga la mutación de un escenario ansioso a otro pesimistaSER GRADUAL ES COSTOSÍSIMO TAMBIÉN. El gobierno tiene hoy la carga de convencernos de que de alguna forma podrá insertar gamma (aceleración) a esta economía y hasta tanto no lo haga decidí vender todo el équity argentino y posicionarme largo en LEBACS a 30 díasunhedged dólar. Cuando no hay gamma, no hay upside, sin upside, dame bonos y guárdate el équity. Ojalá me equivoque y que estos puentes y rutas keynesianas nos hagan crecer como China en 2006, podamos licuar déficit, además repagar deuda y si alcanza, podamos viajar a Júpiter en un barrilete.

Fuente de la imagen

Germán Fermo, Ph.D.
Director, MacroFinance
Director, Maestría en Finanzas UTDT
gf@germanfermo.com
Twitter: @germanfermo
Enjoy Finance!




[Volver]