La Carta de la Bolsa

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“Crisis ¿por qué no aborrecemos esta palabra y asumimos el día a día, que somos lo que somos?...”
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    <strong>Artículo publicado en <a href="http://www.lacartadelbolsa.com">La Carta de la Bolsa</a> el Viernes, 16 de Septiembre en la sección: La Carta</strong>
    <h3 class="titulo_articulo">“Crisis ¿por qué no aborrecemos esta palabra y asumimos el día a día, que somos lo que somos?...”</h3>
    Moisés Romero
    <img src="http://lacartadelabolsa.com/images/ilustraciones/asm.png" alt="" width="122" height="145" style="border: 0;" alt="image" class="ilustraciones" />"¿Por qué no volver a saludarnos en el ascensor, en la escalera, en la calle, en el bar, en la oficina...y hablar del tiempo, de la familia, de lo cotidiano? Crisis, Crisis, Crisis es el término manido. Todo el mundo habla de Crisis, pero nadie actúa. Todo el mundo culpa a la Crisis de la Crisis, pero no sabe por qué. <em>La culpa la tiene la Crisis</em>, una frase, que comienza a resultarme nauseabunda. Hay que volver a los orígenes, retroceder muchos años. Rectificar es bueno. Hay que dialogar, pensar y asumir que somos lo que somos y no lo que nos gustaría ser o nos han dicho que eramos cuando en realidad nunca lo hemos sido", reflexiona uno de mis gurus favoritos.
    <p>“Algunas citas: Las personas que tienen poco que hacer son por lo común muy habladoras: cuanto más se piensa y obra, menos se habla <strong>(Montesquieu)</strong>. Otra más: Si queréis que vuestros labios no yerren, observad cuidadosamente cinco cosas: a quién habláis, de quién habláis y cómo y cuándo y dónde (<strong>Anónimo</strong>). Otra. Muchos habladores pasan por listos, cuando en realidad no son sino cabezas descansadas. Su cháchara brilla y molesta como rayo de sol reflejado en caldero vacío (<strong>Ramón y Cajal</strong>)...”</p>

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“Citas, que abarcan todos los espectros de la sociedad. Son los políticos, no obstante, los más dados a la cháchara, a la diarrea verbal. Los políticos no hacen caso a <strong>Isócrates</strong> cuando sentenció: Solamente en dos ocasiones has de hablar: cuando sepas de fijo lo que vas a decir, y cuando no lo puedas excusar. Fuera de estos dos casos, es mejor el silencio que la plática…”</p>

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“Cervantes dijo: Habla con reposo, pero no de manera que parezca que te escuchas a ti mismo; que toda afectación es mala…Con la CRISIS sucede lo mismo. Todo el mundo habla de Crisis. Todo el mundo conoce las causas de la CRISIS. Todo el mundo mira la paja en el ojo ajeno, porque nadie asume el protagonismo propio en la CRISIS…Sí, hay que aborrecer este término…”</p>

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“Hablemos del día a día. Mi padre tenía una tienda de zapatos. Vendía y arreglaba zapatos. Ahorraba para facilitarnos el acceso a la Universidad. Alguno de mis hermanos no quiso estudiar, pero comenzó a trabajar antes de los 18 años. Mi padre hablaba con sus clientes. Llegaba a casa y nos contaba algunas conversaciones del día. Fulano se ha comprado un Seat 1500 de color negro. Zutano ya tiene teléfono en la oficina ¡Qué adelantos! Pero mi padre seguía arreglando zapatos. Murió recién jubilado, con algunos ahorrillos y ninguna deuda…”</p>

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“Hablemos del día a día y asumamos que somos lo que somos y no lo que nos gustaría ser. Por no asumir lo que somos y vivir como nos gustaría ser hemos hipotecado a los nietos de nuestros nietos con viviendas que nunca podremos pagar, con teléfonos móviles de alta generación, con televisiones de plasma y coches de gran cilindrada ¡Cuántas veces he escuchado en los últimos años frases como: si mi jefe tiene un chalet ¿por qué no puedo tenerlo yo?! Y quien dice un chalet dice un BMW o una televisión de 6.000 euros, con salarios, que apenas superan los 1.000 euros…”</p>

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“En la Bolsa sucede, ha sucedido lo mismo. Mucha cháchara, mucha agitación, mucha plática barata, mucha bagatela. Pero, al final, en su sitio: más abajo de lo que se dijo, más pobre y descapitalizada…hasta que aprendamos a hablar de otra cosa que no sea la CRISIS y afrontemos el día a día: ahí empezará la Nueva Singladura…”</p>



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