La inversión exterior apuesta por bancos, manufacturas y construcción

Redacción - Sabado, 30 de Noviembre

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Aunque el propio Emilio Botín ha rebajado en parte su eufórico mensaje de que "en España entra dinero por todas partes", la realidad es que la recuperación de la confianza de los inversores extranjeros en España es una realidad incontestable, como demuestran los 18.750 millones de euros de entrada de inversiones directas -las que crean riqueza y empleo- en nuestro país que el Banco de España contabiliza entre enero y agosto de este año, que duplican a las registradas durante el ejercicio precedente, escribe José María Triper en elEconomista.

Pero, ¿dónde y quién invierte ahora en España? Si analizado los últimos informes elaborados por la Dirección General de Comercio e Inversiones del Ministerio de Economía, se observa que sólo tres sectores, los de Actividades Financieras y Seguros, Industria Manufacturera y Construcción, acaparan el 77% del total del capital productivo que llega a España procedente del extranjero con datos cerrados hasta junio, que no han sufrido variaciones sustanciales en los dos meses centrales del verano.

Operaciones como la entrada de los magnates de Colombia y México, Glinski y Martínez, en el Banco de Sabadell, o la venta de Evo Bank al fondo norteamericano Apollo, han sido algunas de las operaciones más significativas en el sector financiero, que entre 2010 y el primer semestre de este año lleva acumulados 11,173 millones de capital procedente del exterior.

Esta cifra se verá sensiblemente aumentada con la venta de los bancos nacionalizados que está gestionando el Ejecutivo de Rajoy.

Atención a las finanzas

Y, dentro de estos tres grandes sectores, son los bancos y los seguros de no vida en el área financiera; producción de aluminio, fabricación de equipos eléctricos y electrónicos para vehículos y fabricación de pan, entre las manufacturas; y la fabricación de cubiertas y la promoción inmobilaria dentro de la construcción.

Destaca especialmente el repunte en este último segmento de actividad, que parece apuntar una recuperación del mercado residencial, alentado también por la posibilidad de obtener el permiso de residencia en España a cambio de la compra de inmuebles que se incluye en la Ley de Emprendedores.

Al margen de los tres sectores líderes, en los meses transcurridos de este año se producen también recuperaciones importantes en la llegada de inversiones exteriores en actividades como Hoteles y Alojamientos y Actividades de Clubes Deportivos, con entradas de capital de 273 y 455 millones de euros, respectivamente.

Al margen de los sectores, la Dirección General de Comercio e Inversiones resalta que cuando se analiza en qué tramos está concentrado el 90% de la posición inversora extranjera en España, "se observa que esa cuota está en manos de empresas participadas por extranjeros entre el 75 y el 100 por cien, cuyo stock es mayor de 50 millones de euros y tienen más de cien empleados".

Del total de las sociedades participadas, 1.320 empresas, que representan el 32,2 por ciento del total, generan 1.181.370 puestos de trabajo, o lo que es lo mismo, un 95,5 por ciento de los 1.239.728 empleos creados en España por las empresa invertidas por capital foráneo.

Por lo que respecta a quiénes invierten en España, los datos del Ministerio de Economía desde 2009 hasta junio de 2013 muestran como siete países concentran el 73,3 por ciento del total de los flujos de inversión exterior en nuestro país. En primer lugar, el Reino Unido, con un 21 por ciento del total, seguido de Francia, con el 16,6 por ciento, Países Bajos, con un 12,4%, Luxemburgo, con el 9%, Estados Unidos, que aporta el 8,8%, y Alemania e Italia, con un 3,5%.

Sin embargo, en los últimos meses se observa un fuerte crecimiento, del 352,5 por ciento, de las inversiones que tienen a Francia como país de origen último.

En cuanto al destino geográfico de esas inversiones, Madrid, con un 51,9 por ciento del total, y Cataluña, con el 24,4 por ciento, se llevan la parte del león, al estar en estas comunidades las sedes de las empresas receptoras.

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